Una vez más. Como de costumbre la orquesta lagunera logró que los asistentes se pusieran de pie al final del concierto.
Con un fuerte aplauso recibieron y despidieron la noche del pasado viernes los laguneros al director invitado en el octavo concierto de la temporada 2009 de la Camerata de Coahuila, Manfred Hauss, quien se robó la atención de los asistentes al Teatro Nazas, con la firmeza de una batuta que confirmó porque su nombre goza de gran prestigio dentro de la música internacional.
Desde la interpretación de La Serenata Número 2 en La Mayor, del compositor alemán Johannes Brahms, se notó la fusión que lograron director y orquesta. Para la primera parte, Huss realizó un cambio poco tradicional en el escenario, ubicando los vientos en la parte izquierda del escenario, lo que le imprimió a la primera parte del concierto un toque especial de una claridad sonora específica.
Un concierto que contó con muchos matices, la lucidez de las cuerdas, la maestría del clarinetista César Encina, y la selección del programa, que sin duda fue un degrade sonoro que aumentó de intensidad a medida que fue avanzando la noche.
Un programa que cerró de manera muy acertada con movimientos de percusiones definidos, que dejaron entrever entre los asistentes la calidad y nivel en el que se encuentra la Camerata de Coahuila, que durante este concierto realizó un interesante acople con el director invitado, que entre otras cosas estuvo ofreciendo una Master Class durante su estancia en La Laguna.