Aplazan mensaje del Papa
Concluye hoy encuentro mundial con intervención de Benedicto XVI.
Y la lluvia acabó con la fiesta...
Minutos después de concluir el rezo del quinto misterio del Rosario, la llovizna que apenas caía sobre los asistentes al Encuentro Mundial de las Familias, obligó a los jerarcas católicos a posponer la lectura del mensaje del Papa Benedicto XVI.
“Un cuarto de hora antes de la misa dará su mensaje (el Papa) y al término dará otro en vivo”, aseguró el cardenal Norberto Rivera, luego de que el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, diera la bendición a los asistentes que buscaban algo para cubrirse o que caminaban apresuradamente para refugiarse en la Basílica de Guadalupe.
De las puertas del recinto tuvieron que moverse los peregrinos de Toluca y Guanajuato, quienes se habían instalado con cobijas.
Mientras las familias corrían para refugiarse, al cardenal Bertone lo esperaba una amplia sombrilla dorada y para el cardenal Norberto Rivera una más pequeña con motivos de la última visita del Papa Juan Pablo II.
Conforme cayó la lluvia, los huecos de las gradas y áreas reservadas para la jornada festiva se hicieron más evidentes.
Desde el inicio del Encuentro Festivo y Testimonial, la falta de gente se hizo notar en los lugares de hasta atrás; mientras que al frente, donde los obispos estaban sentados, las medidas de seguridad se incrementaron e incluso evitaban el paso de quienes tenían boleto correspondiente al área.
Los voluntarios esta vez vestían de camisa blanca con pantalón negro y portaban un distintivo amarillo, algunos un chaleco. Altos, bajos, blancos y morenos, con facciones delicadas y con facciones gruesas, de los alrededores y de áreas metropolitanas. Tras los mensajes de los cardenales, el espectáculo inició. La gente se animó y comenzó a balbucear el himno del Encuentro Mundial de las Familias que cantó José Cantoral. Cuando Emmanuel y Alexander Hacha interpretaron una versión diferente de “La Guadalupana”, el público se paró a bailar y hacer movimientos de alabanza.
“Tienes una cosa que sabes que… me encanta”, interpretaba Pedro Fernández de espaldas a los cardenales, mientras todos los fieles bailaban; pero cuando cantó “Cielito Lindo”, Norberto Rivera y Tarcisio Bertone la entonaron desde su lugar.
El ambiente festivo continuó con el desfile de las delegaciones de los países presentes como Angola, Zimbawe, Italia, Estados Unidos, España, Eslovaquia, Argentina y Colombia, hasta México, anfitrión del Encuentro.
Entonces empezó el rezo del Rosario a cargo de Bertone y en cada misterio una familia dio su testimonio de vida.
Los Tofana, originarios de Italia, contaron su decisión y experiencia de ser misioneros en Holanda; los Colop, de Guatemala, platicaron sobre cómo salieron de la marginación encomendándose a Dios; los Simango, nativos de Malawi, mencionaron su labor educadora en África de la cultura de dar ante la carencia de alimentos; Francis y Josephine, paquistaníes, explicaron cómo profesan su fe en un país musulmán en su mayoría, y los Loomis, hablaron sobre su grupo de apoyo de 60 adolescentes que han decidido vivir en castidad.
A las 20:20 horas, el Cardenal Bertone dio la bendición a los presentes; algunos corrían a protegerse de la lluvia, otros observaban bajo sus paraguas el espectáculo de fuegos artificiales. El mensaje del Papa, podrá ser escuchado hasta hoy.
Se reúnen Calderón y secretario del Vaticano
En el marco del sexto Encuentro Mundial de las Familias, el secretario de Estado de la Santa Sede, cardenal Tarcisio Bertone, visitó ayer al presidente Felipe Calderón Hinojosa, en la residencia oficial de Los Pinos.
Mediante un comunicado, la Presidencia de la República informó que durante la reunión, Calderón Hinojosa confirmó la importancia que México concede a sus relaciones con El Vaticano y refrendó la invitación abierta al Papa Benedicto XVI para que visite nuestro país.
El presidente y el cardenal revisaron los principales temas de interés para México y la Santa Sede, tales como la reforma de las Naciones Unidas, el combate a la pobreza, el respeto a los derechos humanos y la protección a los migrantes y sus familias.
