El Concejo de la ciudad de Washington, la capital de EU, dio un paso para convertirse en una de las pocas entidades en legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo.
Los concejales votaron por segunda ocasión la iniciativa que hace legales las bodas entre parejas de gays y de lesbianas, al tiempo que protege los derechos de las instituciones religiosas que definen al matrimonio bajo sus propias creencias.
La iniciativa de Ley requiere sólo ser firmada por el alcalde Adrian Fenty, quien apoya el proyecto de Ley, previo a su envío al Congreso para que sea revisada antes de convertirse en legislación.
Aunque el legislativo estadounidense tiene la prerrogativa de bloquear la entrada en vigor del proyecto después de un periodo máximo de análisis de 30 días, se considera improbable que sea descarrilado por la mayoría demócrata.
De ser aprobado por el Congreso, el distrito se uniría, después de décadas de debate sobre el tema, a Connecticut, Iowa, Nueva Hampshire, Massachussets y Vermont, donde ya se permite el matrimonio entre personas del mismo sexo.