SIN VIDA. El futuro que tenía Sergio Arturo por delante fue truncado con una bala que le lesionó el rostro y terminó con su existencia. El occiso trabajaba de taxista.
En medio de zacate y piedras, el cuerpo de un joven yacía sin vida en un terreno baldío ubicado en la esquina de la calle del Tajo y bulevar Las Cruces del fraccionamiento Lerdo II, de ciudad Lerdo.
Boca abajo
Vestido con camisa rayada de color azul, pantalón de vestir azul marino, un cinturón negro y tenis blancos, el occiso presentaba un disparo de arma de fuego en el pómulo izquierdo. El oido del mismo lado sangraba. Además, se le encontraron heridas en la espalda.
Bajo el fuerte sol de las 11:30 de la mañana, un nutrido grupo de vecinos del fraccionamiento mencionado, y de algunos aledaños, entre los que se encontraban varios niños, se reunieron a observar el cadáver del joven y el levantamiento por parte de los agentes de servicios periciales del Ministerio Público.
Era un taxista
Una llamada anónima alertó al personal de la Dirección de Seguridad Pública de Lerdo. Patrulleros acudieron para acordonar el área donde fue localizado el cuerpo.
El occiso llevaba en vida el nombre de Sergio Arturo Castañeda Ramírez, de 23 años de edad, vecino de la calle circuito San Pablo Segundo, en la colonia del mismo nombre ubicada en Ciudad Lerdo.
El muchacho era taxista de la base Francisco Sarabia de Ciudad Jardín.
Se ignora quién
Las versiones de los vecinos se contradicen, pues mientras que algunos aseguraron que sí escucharon disparos, otros lo negaron rotundamente, dijeron que esa colonia es tranquila, y que es la primera ocasión que se ve un caso parecido a éste.
De momento se ignora quien o por qué motivo fue el ataque al joven taxista, pero las autoridades ya se encuentran investigando al respecto.
En el suelo
Cuando menos cuatro casquillos, cuyo calibre no se dio a conocer, fueron localizados alrededor de los restos hallados.
El agente del Ministerio Público ordenó que el cuerpo fuera trasladado a las instalaciones del Semefo, ubicadas en la Sub- procuraduría de Justicia de Durango, sobre el Periférico de Lerdo.
Ahí se le realizó la necropsia de ley al cadáver, y fue identificado por sus familiares, a quienes se les entregará después de los trámites legales.