El cuerpo sin vida de un policía de Gómez Palacio fue encontrado en el lecho seco del río Nazas seis horas después de que fuera privado de su libertad.
Alrededor de las 8:10 de la noche del sábado, la sala de radio recibió varias llamadas anónimas que reportaron el supuesto secuestro de una persona del sexo masculino. Dicha acción se registró en la avenida Lázaro Cárdenas, a la altura de la Central de Abastos, de Gómez Palacio, muy cerca de la Secretaría de Protección y Vialidad (SPV).
Testigos del percance comentaron a los policías municipales que la persona que había sido privada de su libertad podría tratarse de uno de ellos.
De inmediato, la corporación activó el Código Rojo para solicitar el apoyo de las ciudades cercanas y así blindar las entradas y salidas de la ciudad.
En apoyo a la alerta general que emitió la corporación policiaca municipal, acudieron agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP), el Ejército Mexicano y los elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI).
Sin embargo todo fue inútil, ya que para las autoridades de los tres niveles de Gobierno fue imposible rastrear el vehículo en el que fue secuestrado el elemento, que al parecer era motociclista y pertenecía al grupo Omega.
EL HALLAZGO
La Secretaría de Protección y Vialidad confirmó que la persona desaparecida era un elemento de su corporación y se trataba de Ángel Helder Martínez González, de 28 años.
Ya desactivado el Código Rojo, las corporaciones policiacas de la Región Lagunera, se mantenían en alerta.
A las 2:35 de la madrugada de ayer, los automovilistas que circulaban por el lecho seco del río Nazas, en el desnivel que se ubica a la altura del puente Solidaridad, reportaron el cuerpo de una persona tirada.
Los agentes de las diferentes corporaciones policiacas incluidas Cruz Roja, acudieron al desnivel que se ubica entre el periférico Raúl López Sánchez de Torreón y el bulevar Ejército Mexicano de Gómez. Ahí encontraron a Ángel Helder sin vida, por lo que fue necesaria la presencia del Ministerio Público.
Minutos después el agente dio fe de la muerte del elemento policiaco y ordenó el traslado del cuerpo al Semefo de la Subprocuraduría de Justicia, donde se le realizaría la necropsia de Ley.
En el lugar los elementos de la Federación realizaron una inspección y lograron asegurar alrededor de 26 casquillos percutidos, calibre 9 mm.
