Resguardo. Miembros de las fuerzas de seguridad afganas y bomberos frente a una casa de huéspedes en el Centro de Kabul, Afganistán, donde ayer se registró un asalto talibán. EFE
Cinco empleados de la misión de la ONU en Afganistán y cuatro afganos fallecieron ayer en el asalto de un comando talibán a dos casas de huéspedes en el Centro de Kabul próximas a la embajada española, según distintas fuentes oficiales.
La delegación diplomática española, ubicada entre las dos residencias en la misma calle, recibió el impacto de algunas balas perdidas, pero no sufrió daños entre su personal, dijo una fuente de la embajada.
Al doble asalto a las casas de húespedes siguió horas después el lanzamiento de dos proyectiles contra el lujoso hotel Serena de la capital -objetivo de un audaz asalto en 2008-, que sufrió sólo daños materiales.
Los talibanes se atribuyeron la autoría del ataque a una de las casas de huéspedes en declaraciones de su portavoz Zabiullah Mujahid, quien dijo que el objetivo eran los trabajadores de la ONU que se alojaban en ella "porque estaban trabajando en el proyecto electoral" y la residencia "era centro de actividades electorales".
Afganistán se encuentra en plena campaña para la segunda ronda de las elecciones presidenciales que, como la primera del pasado 20 de agosto, ha sido boicoteada por los talibanes.
La misión UNAMA de la ONU ayuda a la Comisión Electoral afgana en la organización de todo el proceso electoral.
Mujahid, citado por la agencia afgana AIP, amenazó con nuevos atentados para frustrar la convocatoria.
El principal ataque, seguido de un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad afganas, se registró de madrugada contra la casa de huéspedes que alberga a los miembros de la UNAMA, cinco de los cuales perdieron la vida mientras nueve quedaron heridos.
También murieron tres agentes y un civil afganos, según dijo el jefe del Departamento de Investigación Criminal kabulí, Abdul Ghafar Saidzada.
Saidzada aseguró que tres talibanes -equipados, según el Ministerio del Interior, con chalecos cargados de explosivos- murieron en el enfrentamiento con las fuerzas de seguridad afganas, que finalmente se hicieron con el control de la residencia, emplazada en el barrio de Sherpur, en el que se concentran las embajadas extranjeras en Kabul.
El presidente afgano, Hamid Karzai, calificó el asalto que ha costado la vida a los empleados de la ONU de "inhumano" y ordenó fortalecer la protección de las instituciones internacionales en Afganistán, según un comunicado.
Karzai se enfrenta a su ex ministro de Asuntos Exteriores, Abdulá Abdulá, en la segunda vuelta de las presidenciales convocada para el 7 de noviembre próximo.
'Nunca nos detendrán en nuestros esfuerzos'
El secretario general de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-Moon, expresó ayer que ningún atentado mortal contra la ONU, como el ocurrido ayer en Afganistán, detendrá los esfuerzos humanitarios del organismo.
"Nunca nos detendrán en nuestros esfuerzos", expresó el funcionario en una conferencia de prensa en la sede de la ONU, luego de que murieran cinco empleados del organismo en un ataque en Kabul reivindicado por el Talibán.
El secretario general también dijo que había solicitado tanto al Gobierno de Afganistán como al de los países aliados que se hallaban en el país su apoyo para proteger a los empleados de la ONU en el terreno.