MADRID, ESPAÑA.- La ciudad petrolera de Kirkuk, en el norte de Irak, fue escenario hoy de dos atentados, un o de ellos con un carro bomba contra una patrulla de la policía, dejando 11 muertos y seis heridos, informó la agencia iraquí de noticias Aswat al-Iraq.
Agentes del orden circulaban en una patrulla policial cuando un suicida hizo estallar su vehículo cerca de la Facultad de Ingeniería del barrio de Al-Ghirnata, en el centro de Kirkuk, según las fuerzas de seguridad iraquíes.
Además de las víctimas, el atentado suicida causó destrozos a viviendas, almacenes y otros inmuebles aledaños, precisó un vocero del gobierno de la provincia de Kirkuk, donde conviven kurdos, turcomanos, cristianos y árabes.
La policía explicó que el atacante actuó justo cuando los oficiales estaban cambiando de turno, para infligir el máximo posible de víctimas.
Poco después, en la misma ciudad de Kikuk, a unos 250 kilómetros al norte de Bagdad, el director de la policía y sus asistente resultaron ilesos a una explosión, sin embargo dos personas murieron y otras 10 resultaron heridas, según Aswat al-Iraq (Voces de Irak).
Kirkuk, capital de la provincia del mismo nombre, es una zona rica en petróleo que se disputan árabes, kurdos y turcomanos.
El territorio autónomo del Kurdistán Iraquí aspira a anexionarse esta zona una vez que se celebre un referéndum, tal como establece la Constitución iraquí, para determinar el futuro de esta ciudad.
Sin embargo, el gobierno central desea que esta zona se mantenga bajo control directo de la capital del país.
