Un botín menor a los mil pesos en efectivo fue lo que obtuvo un solitario ladrón, que visitó la tarde de este jueves una tienda de conveniencia, donde la principal causa del atraco fue la falta de seguridad de la cadena de tiendas Seven Eleven, que no cuentan con seguridad, donde tienen en su mayoría sólo atienden mujeres que no pueden defenderse en un robo con violencia.
Amaga con picahielo
El atraco donde fue poco el monto que robaron, se registró minutos después de las 18:00 horas de este jueves, en la tienda Pilares, ubicada sobre la avenida Universidad de la colonia Jardines del Valle, donde un persona cubierta con gorro y un cubre bocas llegó hasta el área de cajas de la tienda y amagó con un picahielo a Magdalena Rodríguez Torres, de 27 años de edad, empleada del lugar, a quien le exigió le entregara el efectivo que había en la caja registradora.
No oponen resistencia
Al entrar en un ataque de crisis nerviosa Magdalena y su compañera de labores, decidieron entregar lo que la persona les estaba exigiendo, ya que temían por sus vidas al ver el arma que portaba, por lo que ésta al tener el efectivo entre sus manos salió huyendo a pie rumbo al oriente, donde presuntamente se introdujo por un arroyo y se perdió.
Piden auxilio
Al ver que el delincuente se perdía por la Avenida, las empleadas no perdieron el tiempo y reportaron el atraco al teléfono de Emergencias, 066, donde enviaron a los paramédicos de Cruz Roja para atender de una crisis nerviosa a Magdalena, mientras que policías de todas las corporaciones peinaban el área en busca del responsable, por lo que al regresar los elemento se toparon con la sorpresa que la sucursal nunca se cerró y siguió vendiendo.
