Investigación. El asalto de un comando armado al Cereso de Torreón dejó sin vida a tres acusados de secuestro y homicidio, así como libres a nueve implicados en delitos federales. La PGR atrajo el caso. EL SIGLO DE TORREÓN
La Procuraduría General de la República (PGR), delegación Coahuila, inició la averiguación previa 76/2009 en contra de quien o quienes resulten responsables de la comisión de los delitos de delincuencia organizada; violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos en la modalidad de posesión de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea; así como del delito de evasión de reos, esto en relación al asalto del penal de Torreón cometido por un grupo armado que cobró la vida de 3 secuestradores y liberó a nueve reos del orden federal.
En un comunicado oficial, la PGR deja claro que atraerá las investigaciones que iniciaron con la declaración ante el Ministerio Público Federal, de 25 custodios, un suboficial y el director del Centro de Readaptación Social (Cereso), César Sánchez, en calidad de presentados para que se deslinden las responsabilidades.
Por su parte, la Secretaría de Gobierno de Coahuila y la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJEC), informaron que las personas muertas a golpes y luego calcinadas eran Ubaldo Gómez Fuentes, de 33 años de edad, alias "La Uva"; Carlos Ernesto Palacios Quintero, de 29 años de edad, y Carlos Osvaldo Navarro Valdez, de 30 años de edad, alias "El Niñote", quienes habían ingresado a las 22:00 horas del mismo día 9 de febrero, en cumplimiento de una orden de aprehensión que se había girado en su contra por los delitos de secuestro y homicidio cometidos en perjuicio de un empresario regiomontano, en hechos ocurridos de noviembre de 2008.
También señaló el comunicado "que a las 23:51 horas del día 9 de febrero se activó el Código Rojo reportándose que minutos antes de la hora indicada se había suscitado una fuga en el Centro de Readaptación Social (Cereso), acudiendo elementos de la Policía Federal, el Ejército Mexicano, Policía Ministerial y Policía Estatal, así como agentes del Ministerio Público del Fuero Común y Federal y Peritos".
Las primeras versiones del personal de vigilancia "arrojan que aproximadamente a las 23:30 horas una camioneta tipo Van color blanco, con ocho sujetos a bordo vestidos de negro con pasamontañas, se aproximó al acceso del Cereso y tras amagar al guardia ingresaron hasta la aduana principal, posteriormente condujeron al baño de visitas a tres reos recién ingresados en donde los privaron de la vida, al parecer, golpeándolos con objetos contundentes para luego prenderles fuego a los cuerpos".
Así mismo ingresaron al módulo 35 de donde sustrajeron a nueve reos del orden federal con los que abordaron la camioneta para alejarse con rumbo desconocido.
Durante 33 días estuvieron bajo arraigo los tres secuestradores fallecidos y María de Jesús Guerra Díaz, quien resultó ilesa en el ataque.
Apenas en el Juzgado Primero del ramo penal se había otorgado la orden de aprehensión contra los cuatro presuntos secuestradores y homicidas, dentro del proceso penal 11/2009, el cual quedó sin efecto para los tres varones y se les extingue la acción penal.
En consecuencia a la evasión, el representante social de la Federación continuará obteniendo elementos jurídicos que fortalezcan las líneas de investigación abiertas, respecto a este caso sin precedentes en la historia reciente de la ciudad de Torreón.
Opinión del alcalde
Tras lamentar los hechos ocurridos en el Cereso la noche de anteayer lunes, el presidente municipal de Torreón, José Ángel Pérez, declaró que en esta ciudad todavía es prematuro considerar la posibilidad de establecer un "toque de queda" frente a los altos niveles de inseguridad pública.
Dijo que "esa es mi opinión muy personal'', sin embargo, comentó que son otras instancias, como el Ejército, las que deben determinar una medida de esta naturaleza, al igual que ya se ha implementado en lugares como Ciudad Juárez, Chihuahua.
Al alcalde le preocupa el clima de inseguridad y zozobra que viven los ciudadanos y dijo que no hay otra alternativa que la de que "todas las policías cierren filas".
Refirió que es una situación grave la que ocurre, pese a las acciones de coordinación policiaca.