No fue la Policía, sino el dueño de un carro quien logró atrapar a un ladrón que ya tenía el motor encendido de su vehículo para robarlo.
El "arresto ciudadano", ocurrido el martes pasado, llevó después a la captura de un comprador de autos robados, quien ahora está bajo arraigo.
El ladrón detenido es Luis Alberto Arizmendi Gómez, de 27 años, habitante de Matamoros, quien vendía los autos robados a dos mil pesos.
Arizmendi ya está internado en el Centro de Readaptación Social (Cereso), acusado de robo de vehículo, cometido la tarde del 2 de noviembre, sobre el Paseo de la Rosita y bulevar Revolución.
El automóvil era un Nissan Sentra color gris plata que estaba estacionado junto a la preparatoria Venustiano Carranza.
A las 13:10 horas del martes, el dueño del auto y su hermano, que no fueron identificados, caminaban rumbo al vehículo y vieron al ladrón dentro del carro con el motor encendido. Arizmendi bajó del auto y empezó a correr, pero fue atrapado por los dos hermanos.
Luego de someter al ladrón, llegó la Policía Municipal, que informó de los hechos a la Policía Investigadora del Estado.
Arizmendi confesó que los autos robados los vendía en dos mil pesos a un hombre que conocía como "Chamarro", en el ejido Jaboncillo de Francisco I. Madero.
El comprador fue identificado como Jesús Campirano Ramírez, de 48 años de edad, quien revendía los autos robados en seis mil pesos.
Campirano Ramírez fue detenido y fue puesto bajo arraigo de 10 días, mientras se integra una averiguación previa.
En el presente año se ha disparado el robo de vehículos en Torreón, la mayoría de ellos con violencia.
