La bacteria HP genera un 40 por ciento de úlceras y 20 por ciento de cáncer, lo cual puede originarse desde el consumo de alimentos contaminados.
SANTIAGO | Los alimentos contaminados pueden ser primera causa del mal.
Santiago Papasquiaro, Dgo.- La bacteria helicobácter pylori (HP) se reproduce en el estómago, irrita y mata las células que están a su alrededor, donde se vuelve resistente y de mantenerse sin tratamiento para erradicarla, puede causar úlcera en el 40 por ciento de los casos y cáncer hasta en el 20 por ciento, afirmó el subdelegado médico del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), doctor Ángel González Romero.
Asimismo, esta bacteria genera una toxina agresiva que produce amonio y provoca irritación en las paredes del estómago como paso previo a las úlceras, por lo que es muy importante atenderse médicamente en caso de presentar síntomas.
Síntomas. Las primeras molestias que provoca esta bacteria son ardor e inflamación del estómago, malestar y agruras; posteriormente, al generar úlcera se presenta dolor, el cual se calma de manera momentánea con la ingesta de alimentos. Además, se presenta náusea y vómito.
Sin embargo, no todas las personas presentan los primero síntomas e incluso hay quienes tienen la bacteria, y su propio sistema inmunológico crea defensas contra el microbio, el cual es resistente porque se adhiere a las paredes del estómago y los ácidos pépticos son propicios para su desarrollo.
Contaminación. Mencionó que de las personas diagnosticadas con cáncer en el estómago, entre el 80 y 85 por ciento tienen o tuvieron infección por la HP, la cual ingresa al organismo por la vía oral o fecal.
Esta bacteria se encuentra generalmente en alimentos contaminados, por lo que se recomienda comer en lugares en donde exista la certeza de que su preparación se hace con las medidas higiénicas, además de asearse las manos antes y después de cada comida.
Análisis. El Subdelegado Médico hace énfasis en la importancia de un diagnóstico certero y oportuno, por lo que son indispensables los estudios de coprocultivo, en el cual se “siembran” pequeñas muestras de excremento en cultivos especiales con la finalidad de establecer tipo y características de los microorganismos y saber qué medicamento proporcionar.
También, la prueba de aliento, la cual se administra vía oral una solución de urea, que sirve como alimento para la bacteria, que demuestra si la mucosa gástrica está colonizada por el microbio. La endoscopía es otro estudio que demuestra si el paciente sufre de la bacteria, finalizó el especialista.
