‘Ríos’ de suciedad. Durante la mayor parte de ayer, el drenaje del Centro Histórico estuvo tapado y las aguas negras brotaron por las alcantarillas.
TORREÓN.- Son nuevas instalaciones y ya presentan fallas. La tapadura de un sector de la red del drenaje sanitario en el Centro Histórico, provocó ayer que de tres alcantarillas de la calle Cepeda brotaran aguas negras como si fueran pequeñas fuentes burbujeantes. El problema se registró desde temprana hora y todavía entrada la tarde personal del Simas no podía desazolvar las "bocas" de las alcantarillas porque no llegaba la aspiradora de registros conocida como "Vactor".
El reporte del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), indica que el azolve fue provocado por "la presencia de grasas, popotes, bolsas y botellas plásticas de vendedores de alimentos ubicados en el sector", según Bernardo López, coordinador de Atención Ciudadana de la empresa operadora.
La mayor parte del día, las malolientes aguas negras se esparcieron frente al Museo Arocena, atravesaron la avenida Juárez y llegaron hasta la Morelos. Paseantes del Centro, huéspedes de la Plaza de Armas, ambulantes y principalmente comerciantes establecidos se inconformaron porque la mayor parte del día, "nadie se hizo cargo del problema", dijo Alan González, miembro de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico.
"Ahí están los resultados, no es posible que se trate de drenaje sanitario nuevo y ya tenga problemas. Evidencia también falta de mantenimiento'', expresó.
Y es que en enero de este año, con una inversión de 3 millones de pesos, al margen del presupuesto anunciado para el rescate del Centro Histórico, el Simas cambió alrededor de 800 descargas domiciliarias de drenaje sanitario en las avenida Hidalgo y Juárez, entre las calles Falcón y Múzquiz, las cuales datan de hace más de 60 años.
Este fue uno de los cuatro frentes de obra que se abrieron, ya que "se empalmaron" con los trabajos que hacía Obras Públicas. Esta última dependencia se deslindó del problema y responsabilizó al Simas, ya que es el encargado del drenaje sanitario.
Comerciantes del Centro Histórico, molestos por este problema y la lentitud de las obras, dicen que "las autoridades mejor deberían dejar las cosas así".