El presidente de Estados Unidos, Barack Obama. (Archivo)
WASHINGTON, EU.- Esperando salvar su amenazada reforma del sistema de salud, el presidente estadounidense Barack Obama pronunciará un discurso ante el Congreso en el que presentará nuevos detalles y argumentos en favor del plan.
El discurso fue programado para el miércoles de la semana próxima, un día después de que los legisladores regresen del receso de agosto, lo que subraya la determinación de la Casa Blanca de confrontar a los detractores de la propuesta de Obama y alentar a los partidarios, que han estado a la defensiva. Los aliados del presidente le han llamado a explicar más detalladamente el plan y tomar un papel más activo en el debate, y los asesores de Obama dicen que él lo hará en el discurso ante una sesión conjunta del Congreso.
La fecha escogida indica además que los líderes demócratas han prácticamente abandonado esperanzas de que haya progresos en las negociaciones en el Comité de Finanzas del Senado. La Casa Blanca le había dado a esos seis legisladores —tres de cada partido— hasta el 15 de septiembre para elaborar un plan, pero pronunciará el discurso la semana próxima antes del plazo.
Sigue a un receso de agosto en el que los detractores de las propuesta de salud de Obama dominaron muchos foros de discusiones públicas. La aprobación pública de Obama y su plan de salud cayó en ese mes.
El asesor de la Casa Blanca David Axelrod le dijo a reporteros el miércoles: "Creemos que ésta es la mejor forma de lanzar las discusiones finales, el debate final, y llegar a una conclusión en una forma valiosa".
Los oyentes del discurso de Obama tendrán "una idea clara de lo que él propone y lo que es y no es la reforma de salud", dijo Axelrod, quien declinó dar más detalles.
Axelrod dijo previamente que todas las ideas claves para revisar el sistema de salud han sido reveladas, indicando con ello que Obama no ofrecerá nuevas propuestas.
Pero el presidente pudiera hablar más específicamente acerca de sus prioridades, y quizás añadir detalles de planes pendientes, para salvar la importante iniciativa cuya derrota pudiera asestar un duro golpe a su joven presidencia. Obama se ha pronunciado en favor de reglas que impidan que las compañías de seguros nieguen cobertura basadas en el historial de salud de un individuo y para proveer subsidios a estadounidenses de ingresos bajos y medios para obtener seguro de salud.