La Policía de Honduras detuvo hoy al ex gerente de la empresa telefónica Marcelo Chimirri, cercano al depuesto presidente Manuel Zelaya y familiar de su esposa, acusado de haber recibido sobornos de una compañía estadounidense.
El jefe de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DGIC), Francisco Murillo, confirmó a la prensa que agentes de ese cuerpo detuvieron a Chimirri cuando salía de un banco en un bulevar de Tegucigalpa.
Otros dos ex jefes de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel), Jacobo Lagos y Jorge Rosa; el ex asesor legal Óscar Santos y el ex auditor Daniel Flores, todos nombrados por el Gobierno de Zelaya, también son objeto de órdenes de captura por el mismo caso, indicó Murillo.
La directora de Fiscales del Ministerio Público, Danelia Ferrera, explicó a los periodistas que Chimirri fue presentado de inmediato ante un juzgado penal para "su declaración como imputado", por cohecho, fraude y abuso de autoridad.
Chimirri es muy cercano al depuesto gobernante y familiar de su esposa, Xiomara Castro de Zelaya, y fue gerente de Hondutel durante varios meses en 2007, después de Lagos, y fue reemplazado por Rosa.
A pesar de la estrecha relación, Zelaya destituyó a Chimirri tras denunciarlo ante el Ministerio Público por espionaje telefónico a raíz de la difusión en la prensa de conversaciones del entonces presidente.
El diario estadounidense El Nuevo Herald informó el pasado 8 de abril del presunto pago irregular de 1,09 millones de dólares por parte de la empresa Latin Node a los ex funcionarios de Hondutel, identificados luego por el Ministerio Público en Tegucigalpa.
Según la denuncia, el soborno fue a cambio de un acuerdo de interconexión y una reducción en la tarifa telefónica por minuto.
En la misma información del periódico de Miami, el ex subsecretario de Estado de EU. para Latinoamérica Otto Reich implicó a Zelaya, a quien acusó de "permitir o alentar este tipo de prácticas".
"Ya veremos que él (Zelaya) también está detrás de esto", declaró Reich entonces, a lo que el hoy depuesto presidente respondió con una amenaza de demanda judicial que no se concretó.
La información salió a la luz pública durante el juicio contra Latin Node Inc., con sede en Florida (EU.), que siguió por este caso la División de Fraude del Departamento Criminal de ese estado.