Festejo. El presidente de Venezuela celebró ayer sus diez años en el poder con una reunión del ALBA en la que estuvieron sus aliados.
Levantando las banderas del socialismo y la revolución, el presidente Hugo Chávez festejó ayer una década en el Gobierno, en medio de una intensa campaña electoral que se ha desatado a menos de dos semanas del referendo sobre una enmienda constitucional que prevé la reelección presidencial ilimitada.
Celebró los diez años de mandato con una cumbre de la llamada Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA), donde se suscribieron dos acuerdos sobre seguridad alimentaria y para crear una empresa multinacional de producción de alimentos con un capital de 49 millones de dólares.
“Ha sido una lucha dura contra la burguesía que nos odia a muerte”, agregó.
Afirmó que los conceptos de “revolución, independencia y socialismo, recogen el inmenso aporte que nuestro pueblo ha desarrollo en estos diez años”. Aprovechó el evento para agradecer a sus cinco socios del ALBA y aliados, en especial a Cuba, el apoyo que han brindado a su Gobierno.“Ha sido inconmensurable el apoyo, gracias de nuevo a Fidel (Castro) desde aquí”.
A la IV cumbre extraordinaria del ALBA asistieron los presidentes Evo Morales de Bolivia, Manuel Zelaya de Honduras, Daniel Ortega de Nicaragua, el primer ministro de Dominicana, Roosevelt Skerrit, el vicepresidente cubano José Machado Ventura y Rafael Correa de Ecuador.
“Con nosotros no se equivoquen porque esta revolución es pacífica, pero también es una revolución armada para defenderse de cualquier agresión externa o interna”, dijo Chávez durante una concentración popular en el paseo militar de Los Próceres.
Emitió un decreto en el que declaró el 2 de febrero como día no laborable en todo el país “para que el pueblo y los trabajadores puedan acompañar la conmemoración del décimo aniversario”, informó el Gobierno en un comunicado.
Señaló que si el pueblo respalda la enmienda constitucional en el referendo del 15 de febrero conducirá “el tercer periodo también de la revolución bolivariana desde el 2009 hasta el 2019”.
‘Expulsión de embajador en EU: un honor’
El presidente venezolano, Hugo Chávez, afirmó que fue un “honor” para su “revolución” la “expulsión” de su embajador en Washington, Bernardo Álvarez, en medio de otra crisis bilateral registrada en septiembre pasado.
“Es un honor para un revolucionario que un Gobierno imperialista lo haya expulsado”, declaró Chávez durante una reunión extraordinaria de la Alternativa Bolivariana para las Américas (Alba).
El gobernante venezolano, que promueve el llamado “Socialismo del siglo XXI”, recordó la crisis diplomática con Estados Unidos al presentar en la reunión del Alba al ex embajador Álvarez como presidente del recién creado Banco del Alba.
“Bernardo Álvarez, presidente Banco del Alba (...) tiene en su récord como un honor el haber sido expulsado siendo embajador” en EU, expresó.
