Cruz Azul volvió a caer en excesos de confianza y tras una tempranera ventaja se echó a la hamaca y terminó empatado 1-1 ante Tigres de la UANL. (Jam Media)
Tigres salió ayer entregado, listo para ser goleado por Cruz Azul, que no obstante se mostró como un equipo mezquino y pichicato que mereció ser empatado 1-1 por los de la UANL.
De nada sirvió el gol tempranero hecho por Cristian Riveros al minuto ocho con estupendo cabezazo, pues los celestes se confiaron y dejaron crecer a un rival que más por suerte que otra cosa encontraron el empate al minuto 62, por conducto del paraguayo Ariel Bogado.
El técnico cementero Benjamín Galindo pecó de precavido al echar a su equipo hacia atrás, en lugar de tratar de ir a avasallar a unos temerosos Tigres a los que pudieron hacer zucaritas, pero no quisieron.
Desde el mismísimo inicio del partido, La Máquina había dejado clara su posición con una llegada de gol clarísima, que no obstante el delantero Gerardo Lugo desaprovechó al impactar la pelota en contrarremate contra el poste.
Luego no hubo mucho futbol, sólo intentos, hasta que Marcelo Carrusca entró al 57 en lugar del paraguayo Pablo Zeballos, aunque siete minutos después, el argentino tuvo que salir por resentirse de esa lesión en la clavícula que lo dejó fuera todo el Apertura'08 y que ahora amenaza con dejarlo de nuevo en la banca.
Como sea, no fue por la buena actuación del portero Enrique Eduardo Palos ni lo certero de Ariel Bogado en la delantera de los Tigres de la UANL lo que determinó el empate, sino la apatía de los cruzazulinos, que terminaron abucheados, con justa razón, por su afición en el Estadio Azul.
Con el puntito de ayer, Cruz Azul llegó a cinco unidades en el tercer lugar del Grupo 2, detrás de Chivas y Pumas; en espera de lo que hagan hoy el América e incluso el Morelia, que podría desbancarlo.
Tigres cosechó su segundo punto en el Grupo Tres, que lo mantiene en la zona de descenso junto con Tecos, Necaxa y Puebla.