A lo largo de los seis años que Cruz Azul tiene sin vencer al América hay integrantes de La Máquina que pueden reclamar su tarjeta de cliente consentido como Torrado. (Jam Media)
México, Df.- Rubén Omar Romano recuerda aquella tarde de domingo en el Estadio Azul, la del 16 de marzo de 2008, y menos entiende por qué el Cruz Azul acumula 14 duelos de liga sin derrotar al América.
"Es inexplicable", atina a decir el estratega, vía telefónica. "El destino las hace (esas rachas)".
En el banquillo de las Águilas y con una racha de tres derrotas consecutivas, el argentino decidió entregar la liga y enfocarse en la Copa Libertadores, así que presentó al Socio Águila disfrazado de América. Salvador Cabañas, José Antonio Castro, Óscar Rojas y Alejandro Argüello fueron los únicos titulares de los que echó mano para aquel Clásico Joven en el Estadio Azul.
A pesar de ir abajo en el marcador dos veces y sufrir la expulsión de Armando Sánchez a la media hora de juego, los azulcrema rescataron el 2-2. Fue el único punto en la liga que el sudamericano sumó al frente del América.
"Son cosas del destino. Con un hombre menos terminé empatando en el Azul, y Cruz Azul tenía ventaja. Hay veces que dices '¿cómo puede ser?', pero el destino te lo marca... Y también los errores, que no te permiten redondear una tarde. A veces, cuando menos lo piensas, puedes ganar", complementa el director técnico. "Esa vez nos defendimos bien y aprovechamos las pocas que tuvimos".
Efectividad que debe tenerse en esta clase de cotejos, cargados de rivalidad y sentimientos.
El también ex entrenador de La Máquina asegura que en ninguna de las dos instituciones esta semana es igual a las demás. Por si fuera poco, la hegemonía amarilla le ha dado un ingrediente extra, el morbo por saber si los Cementeros se despojarán del yugo.
"Es muy especial, y ahora más por lo que ha pasado en los últimos años, esto de que el Cruz Azul no ha podido ganarle al América", subraya. "Lo importante es saber jugar esos partidos y, a veces, contar con la fortuna, porque creo que Cruz Azul no la ha tenido en algunos juegos contra América y no se ganaron". Aunque recordar la racha no es recomendable, no en el diagnóstico de Romano, quien perdió los cuatro duelos que disputó con las Águilas al frente de los azules.
Desde su perspectiva, tener presentes los malos resultados en estos juegos perjudica el ánimo de los futbolistas. "Como director técnico, lo erradico, porque los partidos no son iguales", explica. "Hay que concentrarse, hacer bien lo que se trabaja durante la semana...". Y del lado de las Águilas, tampoco es lo mejor usar el dominio como arma, porque "la motivación es jugar contra un equipo como Cruz Azul".
Algo que el América ha demostrado durante los últimos seis años, en los que ha impuesto una hegemonía que ni un hombre que estuvo en los dos banquillos es capaz de entender.
LOS NERVIOS TRAICIONEROS
Son días en que incluso las declaraciones les traicionan. Sucedió en el previo del Clausura 2009. De nuevo un miércoles, aunque ahora sí algunos jugadores cementeros se animaron a hablar. Y ahí el nerviosismo traicionó a tipos como Gerardo Lugo, quien de plano negó que fuera vergonzosa la racha de partidos que tienen sin vencer a los emplumados, "no sé si sea vergonzoso (la racha sin vencer al América) o a veces aplaudir lo que ellos hacen", dijo Lugo.
Hoy la fortuna le cortó al menos tres días a Cruz Azul. Y es que los cementeros jugarán el miércoles ante el Saprissa de Costa Rica dentro de la llamada Concachampions, pretexto más que perfecto para hablar del juego ante América hasta el próximo jueves. "Primero hay que pensar en Saprissa, está bien que venga el clásico joven y que tengamos muchas ganas de ganarlo, pero debemos respetar un torneo tan importante como lo es Concacaf", palabras de Melvin Brown, de un Cruz Azul que en verdad sufre cada semana previa al duelo con las Águilas.
Inexplicable para Romano por qué Cruz Azul no gana
Nublado. Es la única definición que cuadra a la semana previa al duelo con el América que prevalece en La Noria.
No es raro, a Cruz Azul le duele la cabeza nada más pensar en el amarillo. Por eso la constante en los días que anteceden al clásico joven en sus concentraciones, donde las entrevistas son escasas, las respuestas parcas y los horarios largos. Son los días antes al duelo ante su bestia negra.
Una maldición los persigue
Un calvario lento. Casi una crónica de una muerte anunciada, donde las caras se descomponen ante las preguntas que mencionan la jetatura americanista.
Todo vale, igual una puerta cerrada que entrenamientos a doble sesión. Podría decirse que en Cruz Azul lo han intentado todo. Basta un vistazo al pasado. Con Sergio Markarián en el timón, el Cruz Azul del Apertura 2008, el mismo que al final sería subcampeón tuvo en sus manos humillar al peor América de la historia, ese que dirigía Rubén Omar Romano.
Previo al juego, Markarián cerró la puerta a los medios para dar tranquilidad a sus muchachos.
Fue un miércoles atípico para La Máquina, con entrenamiento a doble sesión. Los días que siguieron no fueron diferentes, como tampoco el resultado de aquel fin de semana del 16 de marzo, cuando Cruz Azul no pudo vencer a unos emplumados llenos de jóvenes y que terminaron el partido con 10 hombres.