
Un grupo de científicos develó ayer lo que esperan sea uno de los vehículos de biocombustible más veloces, impulsado por desechos de fábricas de chocolate y fabricado en parte con fibras vegetales. Sus fabricantes esperan que el automóvil alcance una velocidad de 235 kilómetros por hora y aporte ideas a los fabricantes para construir vehículos más favorables al ambiente. El vehículo es impulsado por aceites vegetales y desecho de chocolate convertido en biocombustible.