Reelección. Vista del acto de cierre de campaña del actual presidente y candidato, Evo Morales. EFE
El presidente Evo Morales cerró su campaña electoral con la promesa de lograr que Bolivia dé un salto hacia la industrialización, la integración vial y comunicaciones baratas con un satélite propio.
Morales, que según todas las encuestas ganará en primera vuelta los comicios generales del próximo domingo, terminó su campaña en la ciudad de El Alto, donde se concentraron decenas de miles de sus seguidores de esa ciudad y de la vecina de La Paz.
También asistieron a la concentración miles de aimaras, la etnia a la que pertenece Morales, procedentes del Altiplano.
Morales y su vicepresidente, Álvaro García Linera, destacaron que uno de los principales ejes de su programa de Gobierno para el nuevo periodo es la industrialización de Bolivia, país cuya economía está dominada por la venta de sus materias primas, gas y minerales.
El mandatario enfatizó ante sus seguidores que quiere gobernar cinco años más el país para crear diversas industrias en el país, integrarlo con más proyectos viales con comunicaciones baratas porque Bolivia tendrá un satélite propio con ayuda de China.
García Linera dijo que otros ejes centrales del futuro Gobierno serán ampliar el "Estado de protección social" y el desarrollo de las autonomías con base en la diversidad pluricultural del país.
"Hacia futuro queremos un país fuerte que se haga respetar en el continente, que garantice servicios básicos para todos los bolivianos, con igualdad y bienestar para cada uno de sus habitantes", dijo García Linera.
Morales también criticó a Estados Unidos y convocó a sus seguidores a luchar "sin miedo" contra el "imperialismo norteamericano".
"Si nuestros antepasados combatieron permanentemente a los distintos imperios, ahora nos toca a nosotros pelear contra el imperialismo norteamericano sin ningún miedo, ya lo hemos demostrado en cuatro años de Gobierno para hacer respetar el pueblo boliviano".
Morales y los demás candidatos pusieron fin hoy a la campaña electoral de cara a la votación del domingo, a la que están convocados más de cinco millones de bolivianos.
AGREDEN A CANDIDATA
La candidata a senadora por el partido opositor Plan Progreso Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN) Lourdes Millares fue agredida en la madrugada de ayer cuando salía de un acto de campaña en Sucre, 3 días antes de las elecciones generales, confirmó una fuente de su formación.
Millares, que es diputada de la agrupación opositora Poder Democrático y Social, confirmó a los medios que fue agredida anoche cuando regresaba a su casa junto a su hermana, tras asistir a un acto de campaña para las elecciones del próximo domingo, 6 de diciembre.
Según explicó un portavoz de Podemos, los hechos se produjeron la madrugada de ayer cuando la candidata y su hermana regresaban a su casa y varios hombres tiraron al suelo a Millares, le pegaron patadas y puñetazos y le reclamaron por hablar mal del Gobierno.
La hermana de la diputada, Carmen Millares, confirmó en declaraciones a los medios estos datos, si bien dijo no saber cuántos hombres las atacaron porque, según explicó, uno de los agresores la retuvo y no pudo ver nada.
La candidata se encuentra en un hospital de la capital constitucional de Bolivia con el tabique roto, un fuerte dolor de cabeza, magulladuras y arañazos.
"Estoy bien, pero no me voy a callar. Voy a seguir defendiendo a mi región. La violencia no va a resultar", declaró Millares a los medios desde el hospital en el que está internada.
Por su parte, Savina Cuéllar, la prefecta (gobernadora) opositora de Chuquisaca, cuya capital es Sucre, censuró este acto de violencia contra una mujer y apuntó a que los agresores son militantes del partido de Evo Morales, Movimiento Al Socialismo (MAS) que, aseguró, ya le han pegado a ella y a su familia.
Además, Cuéllar instó al Defensor del Pueblo y a las organizaciones de derechos humanos a actuar y adelantó que sucederá lo mismo con los jurados electorales el próximo domingo en los comicios generales.
Guerrero de la política
El que fuera un pastor de llamas en su niñez se ha convertido no sólo en el primer presidente indígena de Bolivia sino también en un líder para pueblos originarios del continente y referencia obligada para mandatarios de las grandes potencias.
Evo Morales confesó varias veces que nunca soñó con ser presidente pero su vida como su carrera política es una mezcla del azar y la perseverancia. Soñó con la reelección desde que llegó al Gobierno y está a un paso de conseguirla.
"Puedo cometer errores pero jamás los voy a traicionar" suele decir a sus seguidores. Y es que nadie puede reprocharle promesas incumplidas.
