Ernesto Boehringer, directivo de la minera La Valenciana, dijo que se hicieron ajustes en la empresa y se cerró de momento por cuestiones del mercado.
"No quedaron fuera los empleados, sino en stand-by, estamos hablando de 125 sindicalizados y 87 de confianza", dijo. "Los mercados se han visto muy afectados, yo creo que esta crisis creó un efecto que no esperábamos, nos agarró de sorpresa y eso como resultado trajo serios problemas a nivel internacional y nacional, sobre todo que todas las empresas prácticamente estaban sobreinventariadas y eso dio una baja en la producción", expuso.
Dijo que La Valenciana, ubicada en Gómez Palacio, hizo un ajuste muy importante y luego fue cerrada. Boehringer explicó que se espera una mejoría a mediados del próximo año en términos del mercado. La empresa se dedicaba a la fabricación de carbonato de estroncio para la industria de la televisión, mercado que ha sufrido cambios importantes desde que salieron a la venta las nuevas tecnologías en las televisiones de cristal líquido y plasma, de modo que hubo un desplazamiento de este producto y su consumo bajó considerablemente.
Sobre el panorama nacional dijo que el Gobierno debe poner orden en su casa primero y que no es el momento de sacrificar a la industria mexicana y gravarla con más impuestos.
