La jornada electoral para renovar la gubernatura, los 27 escaños del Congreso local y las 58 alcaldías transcurrió sin incidentes mayores, en medio de acusaciones mutuas entre el PRI y el PAN.
La afluencia de votantes no fue abrumadora pero se mantuvo constante todo el día, aunque hasta el momento el Consejo Estatal Electoral (CEE) no tiene las cifras de la participación ciudadana.
Incluso, el presidente del Consejo Electoral Estatal, Rodolfo Aguilar, informó que se instalaron las tres mil 273 casillas programadas en todo el estado, y que las irregularidades denunciadas fueron mínimas y que todas se resolvieron.
La atención de los potosinos estuvo centrada en la información contradictoria que surgió en torno al supuesto atentado que sufrió el candidato del PRI a la gubernatura, Fernando Toranzo.
El priista declaró que no fue objeto de ningún atentado y que los agredidos fueron varios militantes del PRI en Ebano.
Toranzo aclaró que él habló de la agresión que sufrieron un grupo de militantes de su partido en Ebano, y acusó a panistas de dicha acción, que culminó con un enfrentamiento a balazos que al parecer dejó algunos lesionados, lo que no ha sido confirmado.
Sin embargo, el gobernador del estado, Marcelo de los Santos, sostuvo que los agresores son del propio PRI, quienes viajaban en un automóvil, afirmó, propiedad del candidato de ese partido a la alcaldía de Ebano.
Incluso, el senador del PAN, Ricardo García Cervantes, y el representante de la dirigencia nacional del partido, Cuauhtémoc Cardona, ofrecieron una rueda de prensa para también acusar a los propios priistas de las agresiones ya descritas.
Fue una guerra de conferencias de prensa pues el PAN ofreció cinco todo el día, y el líder del PRI, Aurelio Gancedo, organizó otras tantas, acusó a los hermanos Felipe y Jaime Huerta, militantes del PAN, de ser los autores materiales de estos hechos.
