Roberto, Verónica, Anabel, Verónica y Melba.
Momentos increíbles e inolvidables, vivieron alrededor de quinientas personas que asistieron el sábado pasado al 35 aniversario de fundación de la Universidad La Salle Laguna, antes Iscytac.
Los laguneros estuvieron de fiesta, y es que vivir el reencuentro de ex alumnos y maestros, y agradecer a la escuela la infinidad de conocimientos adquiridos es lo mejor en este tipo de celebraciones.
Con una especial eucaristía que tuvo lugar en las canchas de la universidad, dio inicio la conmemoración en punto de las 13:00 horas siendo presidida por los excelentísimos señores obispos de Torreón y Gómez Palacio, respectivamente, don José Guadalupe Galván y monseñor José Guadalupe Torres Campos. Después de la misa de acción de gracias, de elevar una oración por la paz de la Comarca Lagunera y soltar al cielo 35 globos blancos, la concurrencia pasó a disfrutar de un banquete amenizado por el grupo de voces de la ULSA.
Felices de ver rostros conocidos, es como lucieron ex alumnos que por medio de aplausos brindaron homenaje a maestros y personal con años de servicio, mismos a quienes la universidad les ofreció un reconocimiento. Una de estas distinciones fue para el fundador César Efraín Flores (f), su familia acudió a recibir el cumplido.
Viajes relámpagos, realizaron laguneros que vinieron de diferentes partes de México para presenciar tan importante acontecimiento, pues hay que recordar que la ULSA es la primera universidad privada que se formó en la región.
