Consecuencia. Se considera que en el mediano plazo habrá un mayor número de personas con Alzheimer, como resultado del incremento en las expectativas de vida en la población de nuestro país.
Se considera que mientras más adultos mayores se tengan en el país, mayor será la cifra de personas que padecerán Alzheimer en el mediano plazo, por lo que es necesario estar al tanto de la salud de las personas de la tercera edad y saber identificar las primeras manifestaciones de este padecimiento.
Según información proporcionada por la Secretaría de Salud, el proceso de envejecimiento avanza de manera vertiginosa, pues actualmente hay seis millones de personas adultas mayores en todo México.
De acuerdo con los números del Consejo Nacional de Población, el crecimiento de este grupo de personas es del 3.5 por ciento anual y la cifra se duplicará en 2020. De esos seis millones de adultos mayores, el cinco por ciento padece Alzheimer, una cifra que a primera vista pareciera baja. Sin embargo, a partir de los 65 años, la prevalencia se duplica cada cinco años y llega a ser hasta del 45 por ciento de la población de 90 años o más.
Por esta razón , mientras más adultos mayores se tengan en el país, las cifras de personas con Alzheimer aumentará de manera constante, según se dio a conocer por la dependencia.
El Alzheimer es una enfermedad degenerativa del cerebro, que tiene distintas etapas y presenta los primeros síntomas entre los 50 y 60 años de edad.
A partir de los 65 años, la prevalencia se duplica cada cinco años y llega a ser hasta del 45 por ciento en la población de 90 años y más.
En una primera etapa el paciente manifiesta olvidos frecuentes, por ejemplo, nombres de personas, objetos, acciones que realizó en horas anteriores; son los comúnmente llamados olvidos recientes, y que por desgracia muchos toman como propios de la edad adulta y no les dan la debida importancia.
En otra etapa de la enfermedad, el paciente no tiene control de los sentimientos, por lo que puede volverse agresivo y arrojar objetos a quienes estén a su alrededor.
Además, presenta estados de irritabilidad, pronuncia malas palabras e incluso puede manifestar estados de violencia física en ocasiones incontrolables por sus familiares o quienes les acompañan.
Posteriormente se presenta un grado de pasividad total, no habla, tiene movimientos lentos, prefiere estar acostado a caminar, es decir, se encuentra en un letargo total que no responde a ningún estímulo, por lo cual se queda totalmente quieto.
Por tratarse de una enfermedad que prácticamente cambia la vida del paciente y de quienes le rodean, es importante que si alguien cercano presenta alguno de estos síntomas, sea llevado con el médico para una evaluación profunda y conozca su estado mental.
Cuando un paciente tiene Alzheimer es importante el ejercicio físico, pero también es la actividad mental, dependiendo del nivel de deterioro del paciente, como realizar crucigramas, jugar memorama, leer y aprender cosas nuevas para él, lo cual lo mantendrá activo mentalmente.
Existen pacientes que llegan a los 87 años y tienen una agilidad mental que ya quisieran algunos jóvenes, pero esto es porque leen y estudian y no mantienen su mente sedentaria.
Hay muchas cosas que se pueden hacer con y para el paciente con Alzheimer, pues de lo que se trata es evitar a toda costa recluirlo en una habitación esperando pasar el tiempo.
El tratamiento debe ser multifactorial donde intervengan el médico, el cuidador, la familia y el psicólogo.
De éstos, el cuidador es el más importante, pues es quien tiene que vigilar el proceso del paciente, por lo que requiere de atención, incluso psicológica y para lo que existen algunos grupos de apoyo exclusivamente dedicados a los familiares con Alzheimer, según se indicó.
Hay que tener en cuenta que es un padecimiento crónico degenerativo, es decir, no se cura, se controla y con los nuevos tratamientos se inhibe el deterioro cognitivo.
Cuidados
El paciente con Alzheimer en sus distintas etapas requiere de ciertos cuidados:
⇒ Procurarle ejercicio físico moderado de acuerdo a la edad y sobre todo, actividad mental.
⇒ Ésta puede ser a través de crucigramas, memoramas u otros juegos de destreza.
⇒ Las lecturas y otras actividades de tipo mental también son recomendables.
⇒ El tratamiento también debe incluir a médicos, cuidadores, la familia y atención de tipo psicológico.
⇒ De éstos, el de mayor importancia es el cuidador, quien está más cercano al paciente y por lo cual también debe recibir atención psicológica.
