Con gases lacrimógenos y el uso de perros fue controlado el motín que se registró esta mañana en el Reclusorio Sur del Distrito Federal.
Con gases lacrimógenos y el uso de perros fue controlado el motín que se registró esta mañana en el Reclusorio Sur del Distrito Federal.
Aunque el director ejecutivo de Derechos Humanos del Sistema Penitenciario, Miguel Rivera Villa, aseguró que no hay lesionados, personal de la enfermería de esta prisión dio a conocer la existencia de 18 heridos.
Cerca de 500 granaderos arribaron al lugar para resguardar el exterior, mientras que al interior elementos del Grupo Táctico Tiburón, pertenecientes a la Subsecretaría del Sistema Penitenciario, lanzaron gases desde las azoteas, a uno de los patios centrales, para luego someter a los inconformes con la restricción a la visita familiar por el brote de influenza tipo A.
Varios familiares de los presos llegaron al Reclusorio Sur sin conocer que no se les permitiría el ingreso, sino hasta mañana y sólo a dos personas por interno, debido a la contingencia que continúa en fase amarilla.
Las autoridades penitenciarias permitirán el ingreso de una comisión de cinco personas para que conozcan el estado que priva dentro de la cárcel y el estado de los presos.
Rivera Villa dijo que ya tienen identificados a los 50 internos que iniciaron el motín; sin embargo dijo que los disturbios los iniciaron los presos de los dormitorios, 3, 4, 6 y 7, quienes dañaron dos cámaras de videovigilancia y asaltaron la tienda institucional, la cual surte de alimentos.
De igual manera negó que la comida institucional no alcance, tal y como acusó la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, la cual se pronunció a favor de que los días de visita se normalicen para permitir que la población reclusa reciba de sus familiares comida suficiente.
