El obispo de Saltillo, Raúl Vera López, aseguró que la iglesia católica no es cómplice de criminales y criticó la irrupción de la Policía Federal en un templo para detener a un miembro del grupo criminal conocido como 'La Familia Michoacana'.
El obispo de Saltillo, Raúl Vera López, aseguró que la iglesia católica no es cómplice de criminales y criticó la irrupción de la Policía Federal en un templo para detener a un miembro del grupo criminal conocido como la "Familia Michoacana".
Aseguró que debe reforzarse el trabajo de inteligencia de las fuerzas federales para evitar detener a los presuntos delincuentes en recintos donde se exponga la vida de los feligreses.
La Secretaría de Seguridad Pública federal llevó a cabo un operativo la noche del sábado 1 de agosto en el templo del Perpetuo Socorro en Apatzingán para detener al presunto narcotraficante Miguel Ángel Beraza Villa, alias "La Troca", miembro del cártel de La Familia Michoacana.
El lunes, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó una "enérgica protesta" por la "falta de respeto y violencia ejercida" por los policías federales que interrumpieron una misa de XV años para detener a uno de los operadores de ese grupo delictivo encargado de enviar droga a Estados Unidos.
Incluso dijo que la iglesia rechaza la violencia provocada por los grupos delincuenciales, "no acepta lo que está pasando con la violencia del narcotráfico, la responsabilidad del narco y del hampa es de quienes están apoyando desde sus posiciones políticas, desde las empresas y los bancos al narcotráfico, nadie se los quita"
Insistió en que la iglesia -fiel al evangelio- es libre en cuanto a la responsabilidad gravísima que tienen los narcotraficantes.
Puntualizó que en las operaciones policíacas debe prevalecer respeto a las instituciones y los feligreses.
El obispo de Saltillo manifestó que es 'absurdo' que se plantee la coordinación entre la jerarquía católica y la policía para detener a los delincuentes.
