Después de su tanto, Cuautémoc Blanco celebró a su estilo ante la afición del New England Revolution. (Fotografía de Ramón Sotomayor C.)
Previo al calentamiento para preparar su encuentro, jugadores de Tigres y Santos se toparon en el túnel de acceso del Gillette Stadium, saludándose efusivamente sobre todo los ahora felinos Fernando Ortiz y Edgar Castillo con los albiverdes, además del auxiliar Mauricio González y el preparador físico Luis Carlos Bongiovanni.
Los elementos del partido preliminar que ya había terminado, del New England Revolution y Chicago Fire, se dirigían al vestidor, pero un futbolista que daba autógrafos a la tribuna, fue quien llamó la atención y fue abrazado por la mayoría de los integrantes de los equipos mexicanos: el ex santista Oswaldo Sánchez.
Incluso el orgullo de Tepito que ahora juega para el equipo de la MLS de Illinois, le dio la playera del juego con la que derrotó y brilló con una asistencia para gol y una anotación, al presidente de los Guerreros, Alejandro Irarragorri.
Este acto, provocó la rabieta del árbitro mexicano Jaime Herrera (central del Tigres-Santos), debido a que el 'Cuau' ya se la había prometido, a lo que el jugador respondió: "no te preocupes, ahorita te entrego una nueva mía".
Blanco que fue solicitado por los medios de habla hispana, se metió rápidamente al vestidor de Tigres, para saludar al técnico Daniel Guzmán, quien lo dirigió con el lagunero durante la liguilla del Apertura 2008. El "Travieso" no hizo acto de presencia en la zona mixta, para evitar la confrontación con Irarragorri. Cuauhtémoc finalmente otorgó una entrevista a El Siglo de Torreón: "estamos contentos, el equipo hizo un gran esfuerzo, luchamos los 90 minutos. No tengo favoritos ni opciones para la final, que llegue el que sea porqué será un buen partido, tengo amigos y que gane el mejor".
Agregó que está muy satisfecho por repetir en el juego de estrellas de la MLS.
"Pues parece que me eché al equipo al hombro, pero eso no importa porqué comparto con mis compañeros esta enorme felicidad de jugar el partido por el campeonato en nuestro estadio. No es sencillo ganarle al Revolution de visitante". Por último dijo que está listo para el juego del 12 de agosto con México ante Estados Unidos en la eliminatoria mundialista, aunque por lo pronto piensa en Chicago para jugar en la MLS y la Superliga.