La policía canadiense culpó a un ordenador portátil de matar a una persona después de que el aparato impactara en la nuca de su propietaria durante un accidente de tráfico.
Según señaló el periódico 'The Vancouver Sun', Heather Storey, de 25 años de edad, se encontraba de viaje de negocios cuando su vehículo se estrelló contra otro automóvil cerca de la localidad de Surrey, en la provincia de Columbia Británica.
A pesar de que el impacto no parecía lo suficientemente grave como para ocasionar lesiones serias, la infortunada conductora murió ante la sorpresa de la policía.
"El ingeniero examinó el vehículo y pensó que era una colisión de la que debería haber sobrevivido totalmente", afirmó al rotativo el sargento de la Policía Montada de Surrey, Roger Morrow.
Los forenses dictaminaron que Storey murió a consecuencia de un fuerte impacto en la nuca que la policía cree que fue causado por el portátil que la conductora transportaba en el asiento trasero del vehículo.
La policía ha aprovechado el desgraciado accidente para advertir a otros conductores de la posibilidad de que los objetos que transportan en sus vehículos se conviertan en proyectiles mortales en caso de accidente, incluso en aquellas colisiones que parecen menores.