El agresor, identificado como Luis Felipe Hernández Castillo, de 38 años, quien resultó herido en el brazo derecho, fue dado de alta la noche del viernes del Hospital Rubén Leñero y trasladado a las instalaciones de la procuraduría capitalina, en donde permanece detenido. (El Universal)
Seis de las ocho personas que resultaron heridas ayer cuando un hombre disparó indiscriminadamente en una estación de metro de la capital mexicana, y asesinó a un policía y a un civil, fueron dados de alta hoy, informó la Secretaría de Salud del Distrito Federal.
Sin embargo, la dependencia indicó en un comunicado que los otros dos heridos, que recibieron disparos en la concurrida estación de metro Balderas, permanecen hospitalizados y uno de ellos se encuentra en estado "delicado" de salud.
Los lesionados dados de alta fueron identificados como Juan Manuel Velázquez Ruiz, de 42 años; Humberto Pérez Gutiérrez, de 45 años; Gloria Jiménez García, de 38; Maricela Ortega Girón, de 40 años; y la menor Valeria Lara, de 12 años, los cuales sufrieron lesiones musculares y raspones leves.
También salió del hospital Rafael Castellanos García, de 50 años, herido de bala en el hombro derecho durante el incidente; y Félix Manuel López Gutiérrez, con un disparo en la pierna izquierda.
En el Hospital 1 de Octubre del ISSSTE continúa hospitalizado José Dolores Aldape, de 58 años, quien sufrió una herida por arma de fuego en la pierna derecha.
"La bala permanece incrustada en el peroné, pero se encuentra fuera de peligro y su estado de salud es reportado como estable", destacó la Secretaría de Salud.
Por su parte, en la Cruz Roja del barrio Polanco, permanece internado Delfino Aguilar Martínez, de 36 años, un mensajero de la Secretaría de Seguridad Pública local, quien recibió un disparo de arma de fuego cerca del pulmón, y cuyo estado de salud es "delicado".
El agresor, identificado como Luis Felipe Hernández Castillo, de 38 años, quien resultó herido en el brazo derecho, fue dado de alta la noche del viernes del Hospital Rubén Leñero y trasladado a las instalaciones de la procuraduría capitalina, en donde permanece detenido.
Un vídeo de seguridad muestra cómo Hernández asesina a quemarropa a un policía, y después a un civil que intentó desarmarlo.
El atacante fue sorprendido cuando escribía un grafiti que decía "este gobierno de criminales", tras lo cual sacó un revolver que traía envuelto en un pañuelo de un morral.
Testigos de los hechos aseguran que el hombre, originario del estado de Jalisco, dijo que realizó el tiroteo en nombre de Dios.