Manifestantes mostraron su repudio por la sentencia que excluía la pena de muerte a la gerente de una empresa de lácteos responsable de la muerte de varios bebés por vender leche contaminada. (AP)
Dos de los 22 acusados por la intoxicación de 300 mil niños, de los que seis murieron tras ingerir leche adulterada con melamina, fueron condenados ayer a muerte por los tribunales locales, informó la agencia oficial de noticias Xinhua.
El mismo tribunal sentenció a Tian Wenhua, ex presidenta de la principal firma láctea implicada, a cadena perpetua.
Los dos sentenciados a muerte, Zhang Yujun y Geng Jinping, produjeron y vendieron “leche en polvo con proteínas”, una fórmula falsa que en realidad contenía melamina, un químico que se utiliza en la fabricación de plásticos y cemento, y cuya distribución ha causado la muerte de por lo menos seis bebés en China.
Zhang y Geng fueron condenados por “poner en peligro la seguridad pública”, un delito que contempla la pena de muerte, por el tribunal que lleva el caso, el Popular Intermedio de Shijiazhuang.
En esa localidad tiene su sede el Grupo Sanlu, principal firma láctea del país y también la mayor implicada en el escándalo del total de 22 empresas que usaron melamina.
Entre los acusados se encuentran cuatro ex altos cargos de Sanlu, incluida su presidenta hasta el año pasado, Tian Wenhua, que a diferencia de los sentenciados, no ha sido acusada de “poner en peligro la seguridad pública”, sino sólo por producir y vender productos falsos.
Por tanto, la ex presidenta no se enfrenta a la pena de muerte, según declaraciones previas de su abogado, Liu Xinwei: “Según la ley penal, no existe pena de muerte por el crimen de producir y vender productos falsos o por debajo del estándar”.
La melamina eleva los niveles de proteína en los controles de calidad de la leche, pero su ingesta produce en los menores cálculos y fallos renales, motivo por el que fallecieron seis bebés desde mayo.
Los padres de los niños afectados, al menos 300 mil en todo el país, están recibiendo compensaciones de las firmas lácteas implicadas a cambio de no interponer una denuncia en los tribunales.