Le dice el señor a su esposa: "Estoy pensando en comprar un condominio". "Tú sabrás -contesta ella-. De cualquier modo yo seguiré tomando la píldora". (No le entendí)... Pirulina le presentó su último novio a su papá, y éste conversó largamente con el chico. Cuando el galán se va le dice el señor a Pirulina. "Es un excelente muchacho, hija. Merece una buena mujer. Cásate con él antes de que la encuentre"... Babalucas compró un reloj eléctrico grande, de pedestal. Días después fue a la tienda a quejarse. "El reloj no sirve -se quejó-. No marca bien la hora". El dueño envió a un técnico a revisar el aparato. Un instante le bastó al enviado para encontrar la causa del problema: "El reloj no tiene nada, señor -le dice a Babalucas-. Lo que pasa es que debe usted conectarlo a la corriente". Responde el badulaque: "No quiero gastar mucha energía. Nada más lo conecto cuando quiero saber la hora"... El señor de cierta edad advirtió que empezaba a tener problemas para expresar a su esposa en la recámara el gran amor que sentía por ella. Fue con un doctor, y éste, mediante un acertado tratamiento, le devolvió el perdido vigor y el ímpetu de la libídine. Pocos días después llegaron al mismo tiempo a la casa del señor el recibo de la luz y el del médico. "No tenemos para pagar las dos cuentas -dice el señor a su esposa-. ¿Cuál pagamos primero?". "La del doctor" -responde ella sin vacilar. El señor se preocupa. "Pero la CFE nos puede apagar la luz" -dice apurado. "No importa -replica su mujer-. Lo que no quiero es que el doctor te vaya a apagar aquello"... El abuelo le dio un consejo a su nieto: "La vida consiste en vino, mujeres y canto. Tú concéntrate en las mujeres. Cuando llegues a mi edad podrás cantar y beber todo el vino que quieras"... Aquel granjero se sacó la lotería. Lo primero que hizo fue ir al gallinero. "Ya no tienen que apurarse, muchachas -les dice alegremente a sus gallinas-. Ahora podemos comprar los huevos"... Una vez ante un médico famoso llegose un hombre de mirar sombrío. "Doctor -le dice-. Tengo un apetito sexual incontrolable. ¿Qué me aconseja?". "Cásese -le recomienda el doctor-. Así se le irá quitando poco a poco"... Un hombre solicitó divorciarse de su esposa. Alegó que en 15 años de casados el matrimonio no se había consumado. "¿Por qué?" -se sorprende el juez. Explica el individuo: "Todas las noches mi mujer se pone crema en la cara, crema en el cuello, crema en los hombros, crema en la cintura, crema en las piernas... Y siempre me resbalo"... Solsticia, madura señorita soltera, se quejó ante el juez de que un sujeto la recargó contra la pared y así, estando de pie ella, la hizo objeto de sus lascivos apetitos de lúbrica carnalidad y de fornicio. "Pero usted es muy alta -opone el juez-, y el acusado muy bajo de estatura". Explica Solsticia, ruborosa: "Me agaché un poquito"... Le dice un tipo a su amigo. "Te invito esta noche al recital de Plácido Domingo. Tengo dos boletos". "No puedo -responde el otro-. Esta noche toca Bronski". Pasa un mes, y el tipo le dice a su amigo: "Te invito al ballet. Tengo dos boletos para la función de hoy". "Discúlpame -contesta el amigo-, pero esta noche toca Bronski". Una semana después el tipo le dice a su amigo otra vez: "Te invito al concierto de la sinfónica". "Tampoco hoy puedo acompañarte -vuelve a decir el amigo-. Esta noche vuelve a tocar Bronski". "¡Bueno" -estalla el otro-. ¿Quién es ése tal Bronski?". Responde el otro: "Es el baterista de un conjunto de música grupera. Cada vez que tiene tocada yo voy a su casa y paso un agradable rato con su esposa"... FIN.
