La Policía de Tránsito de Cuba está decomisando bicicletas y triciclos a los que sus dueños les han acoplado motores y otros accesorios 'comprados ilegalmente', informa el diario oficial 'Juventud Rebelde'.
Según el periódico de la rama juvenil del gobernante Partido Comunista, son "el último invento criollo que transita por las calles" y muestra "ingredientes de descontrol" por el "frenesí de entrar en la onda, cueste lo que cueste".
Describe el rotativo el "inusitado negocio de algunos establecimientos para adaptarles motores a bicicletas, triciclos, y fabricar hasta vehículos de mayor envergadura".
En la mayor isla del Caribe hay un enorme déficit de transporte, entre otras muchas carencias crónicas, y los cubanos recurren a tractores, camiones de carga, toda clase de vehículos de fabricación casera, bicicletas, triciclos o coches de tracción animal, entre otros, para poder movilizarse.
Según Juventud Rebelde, solo en la provincia central de Villa Clara la Policía de Tránsito ha decomisado recientemente "12 bicicletas y triciclos a los que instalaron motores, además de siete tractores y hasta un pequeño jeep de cuatro plazas".
"¿La materia prima?", pregunta el periódico, y responde: "Motores de turbinas pequeñas, de motomochilas, de esas que se pueden utilizar para la fumigación o el riego de fertilizantes, y de plantas estacionarias de petróleo".
"Los tractores están dotados de motores, vaya usted a saber de dónde los sacaron; y para colmo, en la construcción de algunos emplearon cajas de velocidad y diferenciales de camiones, una verdadera amenaza para el tráfico, debido a que pueden alcanzar altas velocidades", agrega Juventud Rebelde.