La sudamericana se quejó de un trato 'increíblemente abusivo' de parte de Vanessa, quien incluso la obligó a meter su mano en una bolsa de heces de perro hasta reparar una etiqueta de su costosa blusa.
El delantero estrella de Lakers de Los Ángeles, Kobe Bryant, y su esposa Vanessa fueron demandados en una corte del sur de California por su ex ama de casa, María Jiménez, por "trato abusivo y humillante".
Jiménez, originaria de Perú, presentó su querella el 20 de marzo en la Corte Superior del condado de Orange, a 100 kilometros al sur de Los Angeles y en donde pide se le indemnice por daños emocionales, punitivos y especiales.
La sudamericana se quejó de un trato "increíblemente abusivo" de parte de Vanessa, quien incluso la obligó a meter su mano en una bolsa de heces de perro hasta reparar una etiqueta de su costosa blusa.
La demandante se quejó que la esposa del basquetbolista, mientras trabajó para ellos en su residencia de Newport Beach, la llamo "floja, lenta y tonta", y con palabras altisonantes "p... mentirosa" y "p... porquería".
"Me sentí humillada por los gritos e insultos de parte de la señora Vanessa, que me agredió verbalmente delante de su esposo, de sus hijos, empleados y otras personas presentes en su domicilio", describió en la demanda.
El momento más explosivo fue cuando María puso en la lavadora una blusa que costo 690 dólares a Vanessa y después de múltiples insultos, renunció pero ésta le advirtió que no lo haría hasta no pagarle el valor de la prenda.
"Me quedé a trabajarle hasta que le pagué la blusa, pero ahora que ya no estoy he decidido demandarlos por despido injustificado invasión de privacidad, daño emocional y salarios no pagados, entre otros", dijo.
Jiménez, de 48 años, dijo que trabajó 60 horas a la semana en la casa de los Bryant de septiembre de 2007 a marzo de 2008 limpiando su casa, lavando la ropa y manteniendo limpios a los hijos de la pareja.
En la demanda la ex empleada dijo que en una ocasión la señora Bryant, con gritos le prohibio que tocara a su hijo. "Porque te contraté para limpiar la casa, no como niñera", le recriminó.
Jiménez también se quejó de que Vanessa le tenía prohibido tener descansos y que cuando se los pidía ésta le respondía "no has hecho nada", además de acusarla de manera injustificada de robarle ropa y juguetes.
Asimismo, la demandante dijo que por su trabajo le habían prometido un sueldo de 50 mil dólares anuales y seguro médico para ella y su familia, pero cuando necesitó de una cirugía por un quiste en un ovario encontró que su seguro no cubría eso.
Por esa situación, dijo, tuvo que pagar una factura de 120 mil dólares y siete mil más en facturas médicas por terapia física después de lesionarse la espalda en una caída mientras trabajaba en la residencia.
