El gobierno de la ciudad, propietaria del estadio, tiene planes de construir un nuevo desarrollo de negocios en el área que ahora ocupa el Texas Stadium.
El Texas Stadium, la arena deportiva que durante casi 40 años albergó a los Vaqueros de Dallas y sirvió de marco a los momentos más gloriosos del equipo, será demolido tras la apertura del nuevo Cowboy Stadium.
El cabildo de la ciudad de Irving, suburbio de Dallas donde se ubica la instalación, aprobó la noche de este jueves gastar 5.9 millones de dólares para demoler la estructura.
El gobierno de la ciudad, propietaria del estadio, tiene planes de construir un nuevo desarrollo de negocios en el área que ahora ocupa el Texas Stadium.
Los Vaqueros de Dallas jugaron el domingo pasado su primer juego en su nueva casa, el Cowboys Stadium, construido a un costo de mil 150 millones de dólares en Arlington, otro de los suburbios de Dallas.
En comparación, el Texas Stadium, fue construido a un costo de 30 millones de dólares. El estadio fue inaugurado el 24 de octubre de 1971, con una capacidad para 65 mil 675 aficionados.
La estructura albergó además de los juegos de los Vaqueros, encuentros de equipos colegiales y preparatorianos, eventos de lucha libre, conciertos musicales y reuniones religiosas multitudinarias, entre otros.
En el Texas Stadium, los Vaqueros jugaron un total de 312 juegos de pretemporada y temporada regular entre 1971 y 2008, de los cuales ganaron 213 y perdieron 99, aunque nunca albergó un Súper Tazón.
Para los aficionados al futbol americano, el Texas Stadium será recordado siempre por las hazañas realizadas ahí por los jugadores de los Vaqueros como Roger Staubach, Troy Aikman, Emmitt Smith y Michael Irvin.
También por el entrenador Tom Landry deambulando por las laterales con su sombrero fedora.
