El presidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, denunció hoy ante el Congreso la existencia de una 'alianza mafiosa' entre los grupos guerrilleros, paramilitares de ultraderecha y bandas del narcotráfico.
Al instalar este lunes las sesiones ordinarias del último periodo anual del Congreso, Uribe Vélez recordó que los paramilitares eran 'bandas criminales privadas' que tenían como objetivo combatir a las guerrillas de izquierda que operan en este país sudamericano.
'El paramilitarismo ha sido desmontado, pero actualmente sufrimos terrorismo guerrillero y de las bandas criminales', afirmó el mandatario colombiano durante su alocución, ante el pleno del Legislativo.
A juicio del jefe de Estado, los grupos guerrilleros y las bandas criminales 'tienen entre sí una relación mafiosa, se alían o se matan por el botín del narcotráfico. Ambos son confrontados por las fuerzas institucionales con toda determinación'.
Uribe Vélez sostuvo que gracias a su Política de Seguridad Democrática, como denomina a su férrea lucha contrainsurgente, el Estado logró recuperar 'el monopolio de combatir a los criminales y el monopolio de administrar justicia'.
Indicó que en el pasado 'en muchas regiones de Colombia quienes administraban justicia eran los jefes guerrilleros o de los grupos paramilitares, situación que ya está superada'.
'La ciudadanía está más segura, pero con toda razón es más exigente. Antes un crimen, un secuestro, era uno más, cubiertos por anestesia colectiva que anulaba reacciones', apuntó el gobernante.
Uribe Vélez subrayó que 'los ciudadanos ya acuden a la fuerza pública, la comunidad percibe que si hay a quien quejarse, que pueden acudir a las autoridades civiles y Fuerzas Armadas'.
En este país andino operan en la actualidad las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el insurgente Ejército de Liberación Nacional (ELN), así como centenares de grupos emergentes del paramilitarismo y bandas del narcotráfico.
