El secretario del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) en Hidalgo Luis Espinosa, denunció que Luz y Fuerza del Centro (LyFC), en esta entidad, registró hasta antes de su extinción, un adeudo de 900 millones de pesos por parte de presidencias municipales, organismos operadores de agua y particulares, sobre todo de secretarios, subsecretarios y directores de gobierno, quienes bajo su investidura dejaron de pagar el servicio.
El líder sindical afirmó que los funcionarios “aprovechándose de esta condición”, no pagaban su suministro y en los próximos días podrían dar a conocer los nombres. “Con sólo con 100 ó 200 pesos arreglaban el problema y no se les cortaba el servicio”, refirió.
En el caso de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), también tenía un adeudo con Luz y Fuerza en Hidalgo por el orden de los 215 millones de pesos.
Advirtió que ante la falta de infraestructura y los adeudos del sector público se encuentra en riesgo el suministro de energía para las ciudades de Pachuca, Tula y Tulancingo, que eran consideradas zonas criticas, debido a la sobrecarga de las líneas.
Para garantizar el servicio en Hidalgo, dijo se requiere de al menos cuatro subestaciones con un costo de 150 millones de pesos.
Luis Espinosa precisó que el gobierno del estado conoce de la inversión que se debe de hacer en la entidad, para poder llevar el servicio a estas tres ciudades, que son las principales de Hidalgo.
Por ello lamentó que no exista el apoyo del mandatario estatal para la ex tinta compañía de LyFC y acotó, “posiblemente no este bien enterado el gobernador y por ello su apoyo a la decisión de desaparecer Luz y Fuerza”.
Recalcó, “el sabe que se necesita muchísima inversión aquí y yo quiero decir que CFE, tiene mayores deudas que LyFC, ya que compra el 40 por ciento de la energía, por ello no van a poder garantizar el servicio como lo teníamos nosotros”.
