Imagen del estado en que ha quedado el pabellón deportivo de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), donde han fallecido cuatro niños de entre nueve y doce años. EFE
Parte de un centro deportivo en la ciudad norteña de Barcelona se derrumbó el sábado en medio de fuertes vientos, con un saldo de cuatro niños muertos y otras 16 personas heridas, dijeron funcionarios y testigos.
Vientos de hasta 160 kilómetros por hora en algunas partes causaron al menos seis otras muertes en España y Francia, dijeron las autoridades.
Se pudo ver cuando trabajadores de emergencias en el centro deportivo de Barcelona colocaban los cadáveres de tres niños en ambulancias y sacaban a otros 16 menores heridos de los escombros, antes de concluir las labores de rescate. Investigadores de accidentes llegaron al lugar para tomar fotografías y colectar otros datos para documentar la causa del derrumbe.
Un cuarto niño murió en el hospital de Sant Joan de Deu, dijo un funcionario gubernamental a condición de anonimato, de acuerdo con las reglas oficiales. Otros tres niños estaban graves y las otras personas heridas, incluyendo dos adultos entrenadores de béisbol, tenían lesiones leves, agregó la fuente.
Una testigo dijo a TVE que los niños se aprestaban a jugar en el terreno de béisbol cuando tomaron refugio de la tormenta bajo un techo de metal corrugado en las gradas. Una fotografía en el sitio en la internet de La Vanguardia mostró a los trabajadores de emergencia congregados alrededor de una pared de ladrillos derrumbada y un techo de metal.
Una mujer murió al derrumbarse una pared sobre ella en Barcelona y un agente de policía fue aplastado por un árbol en Galicia. Un trabajador de caminos murió en la noroccidental aldea de La Palma de Cervello a causa de la caída de un árbol, un hombre fue aplastado por el derrumbe de una pared en la ciudad de Alicante, en el oriente, y un pescador murió tras ser rescatado de una embarcación zozobrada en el puerto norteño de La Coruña.
La poderosa tormenta azotó también el suroeste de Francia, donde alrededor de un millón de hogares quedaron sin electricidad y las autoridades suspendieron el tráfico ferroviario.
La oficina del gobierno de la región de Landes, en el sur de Francia, anunció la primera muerte en el país a causa de la tormenta _ un chofer cuyo auto fue aplastado por un árbol.
Fuertes lluvias y vientos castigaron la costa sur de Burdeos, y la ciudad enfrentaba vientos de hasta 160 kilómetros por hora.
La televisión francesa mostró imágenes de cables derribados, árboles arrancados de raíz, y un semáforo derribado.
En la región de la Gironda, en Burdeos, socorristas rescataron a 19 residentes de un hogar de ancianos luego que el techo fuese arrancado por la tormenta. Las autoridades evacuaron además a campistas de Landes.
Todos los vuelos en Burdeos y Tolosa fueron suspendidos temporalmente.
