De manteles largos. Ayer, el Cuerpo de Bomberos de Torreón celebró con una misa, torneo deportivo y con una comida en familia, su día, decretado en el años de 1873 en el Puerto de Veracruz.
Su nombre es Javier Medina Hernández. A sus 44 años de edad cuenta con 20 años de experiencia como bombero; profesión que lo apasiona desde su juventud.
El deseo de convertirse parte de este heroico cuerpo de Bomberos, no nació en su infancia. "Cuando yo era niño, no era un deseo para mí", dice Medina, quien con orgullo porta su uniforme.
Cuenta que su pasión despertó en su adolescencia, "venía a visitar a un primo, y así fue como comenzó a gustarme esta labor".
En 1989, dice, realizó su primer servicio. Fue en Lerdo, recuerda, "pero era como voluntario". Un año más tarde, como efectivo de la corporación. "Nuestra misión era apagar una pipa cargada de diesel, que ardió en llamadas allá por el ejido Escuadrón 201", recuerda.
SATISFACCIÓN
Infinidad de historias se han desarrollado en estos 20 años. Pero la que más ha marcado su vida, es el rescate de varios pequeños, que se encontraban atrapados en sus casas en medio de las llamas.
"Hace como año y medio tuvimos dos incendios con diferencia de una semana. Era una casa-habitación la que ardía en ambos casos, en donde pequeños de entre cuatro y nueve años de edad, se encontraban solos y atrapados... casi nos ganaba la desesperación porque no encontrábamos a uno de ellos, cuando finalmente en una recámara que no habíamos visto, encontramos el menor que estaba enredado entre las cobijas debajo de la cama".
El trabajo es duro. Sus jornadas de trabajo no son menores a 12 horas. "Es muy difícil, sobre todo porque no convives con la familia", señala Javier. Sin embargo, sus ratos libres trata de aprovecharlos al máximo.
Y es que, además de ser subcomandante de una de las cinco estaciones de Bomberos, Medina es esposo y padre de tres jóvenes, quienes dice, sólo ve por las noches y en sus días libres.
Aunque su carrera le apasiona, Javier impidió que su hijo mayor siguiera sus pasos. Ahora, éste se encuentra estudiando una carrera profesional.
Pese a su carga de trabajo y su ausencia en casa, Javier está dispuesto a seguir con su profesión "porque ayudamos a la gente en desgracia, eso es lo que me motiva a continuar", puntualiza.
FESTEJOS
Para celebrar el Día del Bombero, decretado en 1873, los elementos, disfrutaron de una Misa de Acción de Gracias, torneos de voleibol y futbol, y de una comida en familia.
JAVIER MEDINA HERNÁNDEZ
Bombero
