"No hay plan B para los pobres", afirmó Ernesto Cordero, titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), cuando se le preguntó si la dependencia a su cargo tiene previsto otro plan en caso de que el paquete económico propuesto por el Ejecutivo federal –que contiene un nuevo gravamen que sería destinado a combatir la pobreza- sea rechazado en la Cámara de Diputados.
El funcionario aclaró que el nuevo impuesto planteado del 2% para el combate a la pobreza tendría un impacto, cuando más, de 69.32 pesos mensuales por familia.
En conferencia de prensa, Cordero indicó que de no aprobarse este nuevo impuesto, habrá niños que dejarán de ir a la escuela y acudir a las clínicas de salud, además de que su nivel nutricional bajará.
Cordero reiteró que las familias más pobres del país tendrán más contribuciones que impacto con el nuevo impuesto y dijo que las familias que están incorporadas a los programas Oportunidades y Alimentario recibirán en transferencias más de 13 veces su contribución.
Reiteró que el Programa Oportunidades se extenderá a las zonas urbanas y se espera que llegue a 6 millones 500 mil familias.
De acuerdo al funcionario, la Encuesta nacional de ingresos y gastos en el hogar 2008, señala que el gasto monetario mensual promedio para una familia en pobreza alimentaria es de 3 mil 466 pesos mensuales.
El funcionario reconoció que este nuevo impuesto sí impactará a la clase media, pero precisó que la prioridad son los más pobres del país.
"Si nosotros estamos en una situación difícil, ellos están en una peor situación", expresó.
El secretario de Desarrollo Social pidió a la población a solidarizarse con los más pobres del país, ya que la situación se ha agravado con la crisis económica y alimentaria a nivel mundial que ha impactado en este grupo.
Mencionó que los ingresos de petróleo se acabaron, por lo que es fundamental cubrir los gastos con impuestos tributarios.
Por ende, dijo, "no podemos disminuir la cantidad de recursos que van destinados a la pobreza.
Ernesto Cordero afirmó que la falta de ingresos en una familia puede generar muchos problemas, entre ellos la delincuencia.
También, precisó que con este nuevo impuesto y con la ampliación de los programas sociales se alcance a 34 millones de personas. De acuerdo a las tres clasificaciones de la pobreza que hay en México, 16 millones de pobres patrimoniales, que son los que no tienen dinero para transporte, vivienda ni vestido, son los que se verían afectados.
