Sin la participación de oradores del partido Nueva Alianza, las otras seis fracciones legislativas en San Lázaro coincidieron ante el director de Pemex, Juan José Suárez Coppel, por no permitir la privatización de esa empresa pública.
En una comparecencia de aproximadamente tres horas que se desarrolló sin contratiempos, el director general de Pemex cumplió ante comisiones el trámite de la glosa del Tercer Informe de Gobierno del presidente Felipe Calderón.
Los legisladores de oposición, integrantes de las comisiones de Hacienda y Crédito Público y de Energía, ante las cuales compareció el funcionario, se quedaron con las ganas de tener un adelanto sobre el proyecto de reestructuración de Petróleos Mexicanos (Pemex).
A finales del mes de noviembre, conforme a lo establecido en la reforma energética de 2008, se deberá presentar un plan para modernizar a esa empresa.
Sin embargo, este miércoles Suárez Coppel no anticipó nada al respecto.
El Partido Acción Nacional (PAN) cobijó al director general de Pemex, al mencionar reiteradamente su convicción de seguir fortaleciendo a esta empresa "la más importante del país".
Pero al final, en voz de la diputada Ruth Lugo Martínez, expuso que "los organismos paraestatales deben recuperar su misión de ser entidades productivas y motores del desarrollo productivo, no oficinas recaudadoras de las autoridades fiscales".
Los legisladores del Partido del Trabajo (PT), Laura Itzel Castillo y Mario Di Constanzo lamentaron que el titular de Pemex no supiera cuáles serán los precios del barril de crudo, de las gasolinas y del amoniaco.
Se le cuestionó también sobre la rentabilidad del proyecto de Chincontepec y las reformas al régimen fiscal de Pemex, que consideraron sólo busca incrementar las ganancias de las empresas extranjeras contratadas por la paraestatal.
El priista Jesús Everardo Villarreal preguntó si Chincontepec se seguirá explorando aun cuando la Comisión Nacional de Hidrocarburos sugirió suspender esas actividades por el incorrecto método de explotación que se aplica.
Por su parte, el perredista Eduardo Mendoza anunció que su partido presentará un proyecto de reestructuración de Pemex para impedir que el capital privado se apodere de esa empresa.
