En 30 por ciento han bajado las ventas en estos últimos meses debido a diversos factores, entre ellos el fuerte desempleo que golpea a la ciudad y al medio rural de todo el municipio, asegura el comerciante, José Luis Marrufo Álvarez.
El también ex alcalde de Madero explica que Madero ya no depende tanto del campo, sino de las maquiladoras que se fueron instalando, pero con los problemas económicos de Estados Unidos, varias tuvieron que cerrar sus puertas y despedir al personal.
Sólo Hanes, comenta, despidió a unos 1,500 trabajadores, más los empleos indirectos, lo cual representó un duro golpe para los maderenses, que se reflejó en emigración de jóvenes y bajas ventas, pues la derrama económica era como de dos millones de pesos a la semana.
"Nuestros clientes vienen también de varios poblados de los municipios de Tlahualilo, Gómez Palacio, San Pedro y Matamoros, y eso es lo que nos ayuda mucho, pero en todos lados se ha resentido la difícil situación económica", explica Marrufo Álvarez.
Añade que, por ejemplo, cuando llegan los pagos de diferentes programas oficiales como Procampo, de Oportunidades, 70 y Más, entre otros, se refleja de inmediato en el Centro de la ciudad con más ventas.