Los cárteles de las drogas impactan más allá de la frontera de Estados Unidos con México, por lo que no se puede limitar a un simple asunto de límites territoriales, dijo hoy el jefe de Inteligencia de la Agencia Estadunidense Antidrogas (DEA), Anthony Placido.
'Desafortunadamente se ha caracterizado mal el problema' del narcotráfico al limitarlo a un asunto fronterizo que proviene de México, afirmó en una audiencia ante el Subcomité sobre Crimen, Terrorismo y Seguridad Interna de la Cámara de Representantes.
Sostuvo que 'las organizaciones criminales que deben ser nuestro enfoque han impactado mucho más allá de nuestras fronteras en ciudades como Atlanta, Lawrence (Massachusetts) y en todo el país'.
Indicó que además de la violencia dentro de un propio cártel y entre cárteles rivales, lo 'más preocupante y nuevo' es que causa de 'angustia' por los ataques contra el gobierno de México y 'civiles inocentes'.
Las agencias federales están analizando 'cuidadosamente' en qué medida esa clase de violencia se puede dirigir contra personal o intereses del gobierno estadunidense o civiles inocentes en territorio de Estados Unidos, recalcó.
Sin embargo, dijo que tras extensas investigaciones 'todavía no hemos visto un esfuerzo de atacar sistemáticamente' intereses de Estados Unidos en un nivel similar al que se observa en México.
Por otra parte, William Hoover, director interino de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), manifestó en la misma audiencia que la mayor parte de las armas de fuego decomisadas en México provienen de Houston y el sur de Texas.
Las armas son usadas para proteger los cargamentos, así como las rutas por las que se trasladan las drogas de México a Estados Unidos, sostuvo el funcionario.
Agregó que los cárteles intercambian drogas por armas y que, además, personas en Estados Unidos compran ilegalmente las armas y las venden en el vecino país a narcotraficantes.
El subprocurador adjunto y director de la Fuerza Especial Contra el Crimen Organizado de las Drogas (OCDETF), Stuart Nash, pidió que además de las iniciativas contra las armas y las drogas, se aprueben leyes para un mayor control sobre el lavado de dinero.
