Pese al cerco sanitario establecido en la Cámara de Diputados, algunos legisladores no siguieron las medidas de seguridad e ingresaron incluso con esposa e hijos.
Fue el caso del diputado Ricardo Franco, quien asistió con su esposa y cinco menores de edad de los que uno ni siquiera portaba el cubrebocas exigido a cualquier persona que se encuentre en las instalaciones del Palacio Legislativo.
En rueda de prensa, el presidente de la Mesa Directiva, César Duarte Jáquez, informó que debido a la emergencia sanitaria los diputados permanecerán en sus oficinas viendo por televisión la sesión ordinaria en la cual se pretende desahogar 20 dictámenes que cuentan con el mayor consenso.
Al explicar la mecánica que se seguirá para la sesión de este martes, Duarte Jáquez informó que cuando haya necesidad de votar los diputados lo harán por bancada, de manera de que cada grupo deberá bajar al salón de plenos para emitir su sufragio correspondiente.
El presidente de la Mesa Directiva manifestó que dada la contingencia no hay ninguna medida de seguridad de sobra, por lo que no se prenderá el aire acondicionado en el salón de plenos para evitar problemas ante el brote de influenza porcina que enfrenta el país.
Agregó que aun cuando se ha confirmado que no hay ningún caso de influenza en el Palacio Legislativo se pidió a mil 500 trabajadores, 28 por ciento del total del personal, que no acudieran a laborar hasta el próximo 6 de mayo.
Basta con los tres mil 500 trabajadores que sí están laborando en las diversas áreas de la Cámara de Diputados para cubrir las necesidades del recinto legislativo, en el que se clausurará el periodo ordinario el 30 de abril próximo, sostuvo.
Duarte Jáquez insistió en que hasta el momento no se ha detectado ningún caso confirmado de influenza en la Cámara baja salvo las molestias que presentó el diputado tabasqueño Moisés Dagdug, quien fue enviado al servicio médico para ser revisado y evitar cualquier problema.
