Desoyen la recomendación de las autoridades
A pesar de que las autoridades de los tres niveles de Gobierno recomendaron que ante la alerta sanitaria por el virus de influenza AH1N1, los ciudadanos permanecieran en sus casas tomando las medidas de precaución necesarias, desde muy tempranas horas del día las calles de Torreón parecían estar marcadas en el calendario con un inesperado día festivo, que con el paso de las horas movilizó un considerable número de transeúntes.
Gran parte de los comercios de las avenidas Morelos, Juárez e Hidalgo, cerraron sus puertas en un día en que habitualmente representa un repunte en ventas. De la misma manera los peatones empezaron a invadir las calles pasadas las 11:00 de la mañana.
Por más que la autoridades pidieron no confundir medidas de prevención con días vacacionales, muchas personas aprovecharon la soledad de las calles para darse la tradicional vuelta dominguera por la Alameda y las Plaza de Armas.
Según comenta la dependiente de una tienda de ropa ubicada sobre la avenida Morelos, su jefe les habló por teléfono para que sí fueran a trabajar, después de percatarse del número de personas que estaban caminando sobre la vialidad, aunque aclaró que si bien es cierto hay buena circulación de personas, las ventas han sido pésimas.
En el caso de los comerciantes informales, la mayoría salió a trabajar de manera normal, incluso los tradicionales puestos de comida, que pese a tener medidas sanitarias precarias, aprovecharon el flujo de personas para hacer su agosto.
Lo que en un inicio fue una recomendación para evitar el contagio del virus de la influenza, terminó por convertirse literalmente en un extenso puente que es aprovechado por familias enteras que visitan el Centro en busca de un elote o una nieve.
De la misma manera el cubrebocas parece ser un elemento de seguridad que pasó de moda como cualquier prenda.
FEDERICO LEDESMA
Oficios varios
GERARDO ÁVALOS
Visitante al Centro
OMAR GARCÍA
Operador
CONSUELO RUIZ
Estudiante