Después de 20 años registran su marca

Después de 20 años de operaciones dentro del mercado, Productos Metálicos Cob aún no registra su marca y ve frenados sus proyectos crecer y vender sus equipos para el manejo de materiales (montacargas y diablitos) dentro y fuera de México.

La necesidad de expandir su mercado a otras regiones del país y con la idea de exportar sus equipos a Estados Unidos, por ejemplo, ha obligado Gerardo Ortiz Abdala, gerente de la compañía, a realizar los trámites ante el Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual (IMPI) para registrar su marca propia, pero también para registrar las patentes de sus productos.

Ortiz Abdala fue uno de los 22 microempresarios que participan en la cuarta edición del Programa Adopta una Empresa, y gracias a que está participando con alumnos de la Universidad Iberoamericana, ahora sabe de la importancia de tener un registro de marca de todos sus productos, pero sobre todo del diseño de sus equipos.

La microempresa inició operaciones en 1989 y se dedica a la fabricación de equipo para el manejo de materiales, como montacargas y diablitos.

Destacó que gracias a que fue "adoptado" busca hacer una organización interna de su negocio", ya que como microempresario no pueden hacerla de todo. Contando con una gran grama de productos que ya se comercializan de otras ciudades del país y que asegura que compiten en calidad a nivel internacional, reconoció que no tiene los medios ni las herramientas para saber el cómo acceder al mercado nacional e internacional, sobre todo si no cuenta con una marca registrada.

El microempresario manifestó que desconocía que para exportar sus equipos era necesario registrar sus diseños de equipos y tener una marca propia, por lo que si no ha sido adoptado seguramente continuaría sin preocuparse de tener un sello propio de sus productos.

"Tenemos el 100 por ciento de productos originales y que se comercializan a nivel nacional, los cuales pueden competir con cualquier producto del ramo en calidad y presentación. Pero no tenemos una marca propia".

Al igual que Ortiz Abdala muchos microempresarios emprendedores aún no han registrado sus diseños de productos o servicios, por lo que se encuentran desprotegidos ante cualquier eventualidad.

A partir de que ha recibido la asesoría de estudiantes que participan dentro del Programa Adopta una Empresa ya sabe que para poder exportar es necesario contar con un nombre propio, que México tiene un sinfín de acuerdos comerciales y no sólo con Estados Unidos o Europa, sino con Centro y Sudamérica.

Confesó que los microempresarios "desconocemos toda esta información de acuerdos comerciales y registros de marcas".

 CUARTA EDICIÓN DE ADOPCIÓN

El Programa Adopta una Empresa está por concluir su cuarta edición, por lo que 22 microempresas fueron beneficiadas con asesorías y apoyos para reestructurar su negocio, hacer planes de negocio para comercializar sus productos dentro y fuera del país.

El próximo 20 de mayo es la cita para ver la graduación de empresarios, los cuales algunos de ellos ya cuentan con más de 20 años dentro del mercado, pero es hasta ahora que se animaron a ver más allá, y exportar sus productos a nivel mundial.

En esta ocasión hay una diversificación de proyectos en relación a lo que fue la primera edición, ya que se atendieron negocios de alimentos, artesanías, pero también negocios de terapias mediante el uso de equinos, empresas del ramo metalmecánico que diseñan y comercializan sus productos en algunas ciudades del país, pero que no tienen marca propia ni la patente de sus diseños.

Para la clausura se esperan cosas buenas con la firma de un convenio con el Ayuntamiento de Gómez Palacio, lo cual abre el mercado de atención en la región.