Tras una era genial de Bob Dylan, la cual iniciara en 1997 con el álbum Time Out of Mind, pasando por los discos de 2001 y 2006, Together Though Life y Modern Times, el maestro de Duluth, Minnesota, nos presenta sus trigésimo tercer álbum de estudio, el cual es una oba romántica, en el sentido clásico y no comercial de la palabra, en donde notamos un mood relajado de Dylan, donde las composiciones de amor salen naturalmente sin dejar mucho paso a la concientización, que en manos de un trovador de la talla de Dylan te conmueve, te alegra, te pone a meditar, a extrañar, y a amar.
En Together Through Life existen canciones como This Dream of You que te vuelve a enamorar de tu pareja o te pone a pensar en la muchacha sencilla que alguna vez conociste y te sigue gustando, mientras canciones como I Fell a Change Coming' On te hace recordar que al tener el amor de una mujer, lo que suceda al mundo tal vez no es tan importante.
Musicalmente encontramos joyas como la del primer sencillo, Beyond Here Lies Nothin', un blues rígido donde me pregunto qué tanto tuvo que ver en la letra Robert Hunter, uno de los grandes songwriters olvidados de la historia del rock y quien colabora Bob Dylan en casi todas las letras de este disco, privilegio el cual puede presumir muy pocos letristas.
Otra joya es Life is Hard, canción que de inmediato se volverá en las clásicas de Dylan, cuyo título pesimista viene bien al caso por ser una historia de abandono. Cabe destacar que Life is Hard sirve de inspiración para el concepto del álbum, al ser la primera obra compuesta para el mismo y cuyo propósito al ser creada era formar parte del soundtrack de una película del cineasta francés Oliver Dahan.
En lo personal Together Though Life me gustó, es muy bueno, pero tal vez no excelente, la verdad unas canciones no me acabaron de convencer, e irremediablemente me viene a la mente cómo me gustaron los discos anteriores de Dylan, sintiendo que aquí falta algo más o de que me estoy perdiendo de algo.
Bueno, es Robert Zimmerman, ¿quién se atrevería a juzgarlo? Por amor a la música, sería un pecado de melómano no tenerlo en tu colección, o en tu computadora.