UNA VUELTA POR EL CHOPO
El sábado fui al famoso Tianguis Cultural del Chopo... no pienso en este artículo comentarles su historia o por qué se dio tan popular y peculiar tianguis que ya va a entrar a sus treinta, aunque de cierta forma sí me interesaría, pero la verdad es que no cuento con acceso a Internet para dedicarme a la investigación y pues como no soy defeño ni idea...
Déjenme les comento que esta fue la tercera ocasión en mi vida en la que fui, y como la primera vez sentí esa sensación de bienestar de encontrar en tu país un epicentro de la contracultura, o más bien, de la cultura del rock and roll y derivados, o sea que en mi caso, una de las pasiones de mi vida.
Desde que vas en el metro rumbo a la estación Buenavista, por su "fachas", sabes quién va al famoso Chopo, y ya en sus alrededores percibes de sobremanera dos de las llamadas tribus urbanas: los góticos y los punketos, aunque yo me acuerdo que hace cinco años destacaban en estos alrededores los jóvenes en sus skates.
Literalmente el Chopo, como su nombre oficial lo indica, es un tianguis, en donde lo que se comercia es el rock and roll de acorde a sus escuelas y culturas en diversos locales; por lo tanto contamos con locales donde la venta de artículos, CDs, DVDs (piratas y originales) y Long Play(s) giran alrededor del art rock, heavy metal, rockabilly, punk, reggae, dark, new wave, ska, brit pop y a la gran mayoría de la gama de corrientes y mercados que el rock nos pueda ofrecer y que a ustedes se les pueda ocurrir... Aunque parece ser que la cultura emo no entra ni por asomo al tianguis, o por lo menos eso yo percibí.
Lo mejor de todo te lo encuentras en el espacio de atrás del Chopo, por llamarlo de alguna manera, ya que ahí esta la esencia del tianguis, que es la compra y venta de material fonográfico y de video de particulares a particulares, con material obviamente usado, y otro más bien nuevo (lo que me da a entender que varios son comerciantes de a pie que están ahí cada sábado dedicándose a esto).
También te encuentras joyas para tu fonoteca y videoteca privada de la cual, de alguna forma tradicional, difícilmente hubieras tenido acceso, y sobre todo a precios bastante accesibles.
Obviamente aquí en el ambiente se respira a las vacas sagradas, desde The Beatles o Pink Floyd, pasando por Zeppelin, Sabbath, Iron Maiden, U2, AC DC o Metallica, hasta Nirvana y Radiohead y aterrizando en The Killers.
Por supuesto hay bandas en vivo, negocios de perforación y tatuajes; venta de algunos artículos para consumo de mariguana, de ropa y accesorios, y alguna que otra asociación entregando panfletos de protesta contra lo que se les ocurra (el chiste es quejarse de algo).
Bueno, ya lo saben, cuando visiten el DF no pueden dejar de ir, si es que se encuentran en sábado, al Tianguis Cultural del Chopo; yo por lo menos siempre que ando en el DF no puedo dejar de visitarlo, aunque sea un momento.