Un hombre resultó herido de bala, luego de que evadiera el retén de militares que se instaló en la carretera a Mieleras.
Aproximadamente a las 10:30 horas de la noche, un taxista arribó al área de urgencias de la Clínica del Magisterio, debido a que había sufrido una herida de bala en la clavícula.
Al recibirlo y atenderle su herida, el personal médico de dicha clínica solicitó la presencia del Ministerio Público debido a que la herida era delicada.
El lesionado, Iván Fernando, señaló que no quería interponer ninguna denuncia por temor a represalias por parte de las autoridades militares.
Sólo señaló que minutos antes de que fuera baleado por los soldados, un par de hombres a los que les brindó el servicio de trasladarlos, habían intentado asaltarlo.
Después de forcejear con ellos en las calles del ejido Rancho Alegre, a donde le habían pedido "el viaje", logró evadir el asalto, ya que intentaron quitarle lo que llevaba de los pasajes, así como el vehículo.
Por lo que tomó la carretera a Mieleras rumbo a Torreón, cuando de pronto a la altura del ejido Los Arenales, se topó al retén de los soldados, en el que no se quiso detener por temor a que lo fueran siguiendo los ladrones.
Dicha situación molestó a los efectivos militares y dispararon en su contra, logrando herirlo en la clavícula derecha, luego de que el balazo entrara por el cristal trasero del vehículo.
Luego de recibir las atenciones médicas, Iván Fernando, de 30 años de edad, vecino de la colonia Nueva California, preguntó si su herida no era de gravedad para retirarse de la clínica, ya que él no pretendía realizar la denuncia, sólo que quedara el reporte de que los elementos militares en lugar de disparar contra algún punto del vehículo disparan directo a los conductores, lo que podría provocar algún accidente.
