Al Qaeda ya no está en Afganistán. El jefe del Mando Conjunto Central estadounidense, el general David Petraeus, afirmó ayer que la organización Al Qaeda ya no está presente en Afganistán, aunque algunos de sus grupos afines sí tienen 'santuarios' en el país. El general coincidió con unas declaraciones que realizó hace unos días el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, quien aseguró que Al Qaeda ya no está presente en su país. AGENCIAS
KANDAHAR, Afganistán.- Dos ataques suicidas consecutivos en un retén policial y una parada de taxis causaron ayer siete muertos y una veintena de heridos en el Sur de Afganistán, dijeron las autoridades. La mayoría de las víctimas fue de policías y soldados que respondieron al primer ataque suicida.
El primer atacante suicida detonó los explosivos que llevaba en una motocicleta cerca del puesto de vigilancia y estación de taxis en el pueblo de Gereshk, en la provincia Helmand, dijo Dawood Ahmadi, el vocero del gobernador.
El subjefe de la Policía provincial Kamaluddin Khan relató que cuando la Policía y unidades del Ejército llegaron al lugar tras el ataque, un segundo atacante suicida que merodeaba por el lugar activó su carga explosiva, provocando un mayor número de víctimas. Las explosiones mataron a siete personas -cuatro elementos de seguridad y tres civiles- además de herir a 20 personas, dijo Ahmadi. Un vocero del Talibán, Qari Yusef Ahmadi, reclamó la responsabilidad de ambos ataques.
Khan no dio una cifra exacta de los muertos y heridos, pero señaló que más de veinte personas murieron o resultaron heridas en los ataques, en su mayoría policías y soldados.
La provincia de Helmand tiene la mayor producción mundial de amapola y ha sido escenario del mayor número de acciones de violencia en Afganistán.
En otro ataque ayer, una bomba colocada al pie de un camino rural estalló en la provincia de Nangarhar, matando a ocho albañiles que estaban por construir un puesto de control fronterizo, dijo Ahmad Zia Abdulzai, portavoz del gobernador de Nangarhar.
Otros tres civiles afganos, el chofer y dos asistentes, murieron al estallar una bomba en un camino de la provincia de Zabul. Los hombres transportaban suministros para una base estadounidense, informó Ghulam Jalani Khan, subjefe policial de la provincia.
Otros dos policías murieron en una explosión en otro lugar el sábado, agregó.