Dos de los cuerpos encontrados en los límites de Guerrero y Michoacán dentro de bolsas de plástico eran Policías Ministeriales que habían sido secuestrados el pasado domingo en el poblado de Petacalco en el municipio La Unión, en la Costa Grande del estado.
De acuerdo con el reporte oficial de la Secretaría de Seguridad en la entidad y el procurador de justicia del estado, Eduardo Murueta Urrutia, confirmaron que los dos cuerpos embolsados y que fueron encontrados alrededor de las 10:00 de la mañana de este jueves cerca de la comunidad de Zacatula, pertenecientes al municipio de La Unión, eran agentes de la Policía Investigadora Ministerial.
Los dos cuerpos de los agentes de la PIM correspondían a los nombres de Carlos García Dorantes y Alfredo Efraín Pariente Zitlalapa, quienes fueron “levantados” por hombres armados que se desplazaban en tres camionetas, luego de que fueron asesinados en Petacalco, el comandante de la PIM, Obdulio Lozano Tirsio y el agente Fernando Maldonado Tenorio.
Más tarde, elementos policiacos encontraron sobre la autopista siglo XXI a la altura del kilómetro 69+050, cerca de la caseta de cobros Feliciano, aun costado del puente que comunica con el Estado de Michoacán, dos cuerpos que estaban adentro de dos bolsas negras.
La Secretaría de Seguridad Pública dijo que estos dos cadáveres que también estaban despedazados y con huellas de tortura, aún se encuentran en calidad de desconocidos pero oscilan entre los 30 y 35 años de edad.
De acuerdo a informes preliminares de los peritos criminalísticos, los cuatro cadáveres presentan huellas visibles de torturas como golpes y la decapitación por el clásico torniquete que es aplicado con un alambre recocido que es apretado en el cuello hasta matar por asfixia primero y cortar el cuerpo poco a poco.
Eduardo Murueta Urrutia agregó que los peritajes iníciales indican que la muerte de las cuatro personas fue perpetrada apenas cuatro o cinco horas antes del hallazgo y que las cuatro bolsas que fueron depositadas por la madrugada.
