¿Un colado? No, se trata de aficionados de cartón que ayer adornaron las desoladas tribunas del Estadio Corona. (Fotografía de Ramón Sotomayor)
En un estadio casi mudo, con apenas alrededor de 200 personas en su interior, todas ellas con alguna labor que cumplir, los Guerreros del Santos Laguna consiguieron un triunfo que vale oro para sus aspiraciones de calificar.
Esta vez la algarabía en las tribunas quedó ausente por el virus de la influenza, si acaso un grupo de porristas de "La Tribu'' apoyaron en forma incesante desde afuera del estadio con sus cantos y tambores.
Se trató de un grupo de aproximadamente 50 elementos, quienes ante la imposibilidad de ingresar al estadio optaron por establecerse junto a la reja para manifestar su respaldo a los santistas.
Esta vez los alrededores del estadio y el estacionamiento interior del coloso de la calzada Ávila Camacho lució desolado, muy diferente a otros domingos, sin movimiento, sin largas filas de autos, sin vendedores de las clásicas tortas, gorditas, aguas frescas, semillas, souvenirs o revendedores de boletos; prácticamente sin nada de lo que caracteriza a un domingo de futbol.
Dentro del estadio sólo policías municipales, elementos de protección civil, servicios médicos, los jovencitos recogebalones del propio club local y eso sí, una gran cantidad de trabajadores de los medios de comunicación local y nacional que dan cobertura en cada jornada al futbol profesional en La Laguna.
Esta vez se podían escuchar perfectamente los gritos en cada una de las bancas, así como en el mismo campo de juego, donde los elementos suelen no hablarse en forma muy cortés.
Las tribunas apenas con algunos aficionados de cartón fijados de forma estratégica, dos mantas de apoyo a nombre de la afición y una gran manta de "gooooooooool'', la cual se descubrió luego del primer tanto de la escuadra albiverde.
200
Personas
Aproximadamente tuvieron el privilegio de ver en vivo el juego entre Guerreros y Gladiadores.